Mi eterno amor de verano

Vacaciones con los suegros (2)

-Mi amor- la abrazó- te amo con mi vida- se separó y la miró a los ojos- yo... yo quería saber si...- suspiró- Matilda Vacchio ¿te quieres casar conmigo?... ¿quieres comprometerte conmigo?...

 La respiración de ella se aceleró, mientras Thomas sacaba una cajita de su bolso y la abría frente a Matilda, quien no salía de su asombro...

-Mi vida... ¿quieres?- volvió a preguntar él.

-Yo... Thomas...- comenzó a llorar- lo siento soy tan emotiva, lloro por todo- se disculpó- si  mi amor- respondió- si quiero casarme contigo.

-Te amo preciosa- la besó, al concluir, sacó con cuidado el anillo de la cajita, era muy sencillo, de oro blanco con tres pequeños diamantes, se lo puso lentamente mientras decía- tiene un significado para mi, son tres diamantes, uno es el pasado, otro es el presente y otro es el futuro, al estar los tres juntos, y en un anillo, significa que quiero compartir mi vida contigo y esas tres partes importantes.

Ella sonrió- te amo Thomas, no llevamos casi nada de novios, pero hemos pasado tantas cosas, siento que llevo años contigo, me has apoyado tanto, me conoces más que a mi misma- cogió la cara de él y lo miró fijamente- yo también quiero compartir mi vida contigo, te amo- y lo besó.

En ese instante sonó el teléfono de Matilda

-¡Papá!- dijo ella emocionada.

-Hija mía, me llamó tu madre... ¿Estás bien cariño?

-Estoy acostumbrada, descuida- contestó ella- siempre ha sido así.

-Me contó que estabas con tu novio en la ciudad ¿Porque no pasan unos días acá en mi casa?, a tu abuelo no le molestaría ver a su nieta preferida más seguido y a mi no me molestaría conocer a tu novio ¿Qué dices?

-Amor- llamó Matilda a Thomas- mi padre nos invita a pasar unos días con él y mi abuelo, ¿Que dices?

-Si tu padre es totalmente distinto a tu mamá, encantado preciosa- sonrió.

-Papá, iremos- contestó ella al teléfono.

-Perfecto, los espero, te quiero princesa, nos vemos- cortó.

-Thomas, gracias por aceptar, mi papá es tan distinto a mi mamá... no te imaginas...- suspiró- todos dicen que la personalidad de mi padre  la heredé yo...- sonrió- creo que es así.

-Pues, si es así, creo que nos llevaremos bastante bien- encendió el vehículo, ¿por donde me voy futura señora Kapplan?-preguntó.

-Enseguida lo dirijo Señor Kapplan- le sonrió- Pensar que en la boda de Paula con Tavo, yo no recibí el ramo... jejejeje no te imaginas cuanto te amo- confesó- sigue derecho amor...- y comenzó a darle indicaciones...

Por otra parte Nickol y Alonso habían encontrado un departamento maravilloso para ellos dos, era grande, tenía tres habitaciones, dos baños, un living comedor y una cocina americana, y tres balcones. Lo estaban restaurando, pues los colores no les habían agradado y además de ello, habilitarían la habitación más espaciosa como un pequeño estudio y las paredes de colores más vivos.