Mi eterno amor de verano

Vendetta, tratos y sorpresas

-Un gusto Gustavo- sonrió Nicko- de verdad lamento lo del golpe.

-Para ser bailarina tienes fuerza- comentó el chico aun sobándose el rostro- tú novio te tiene miedo- dijo el bromeando.

-La verdad es que no tengo novio- contestó Nicko coquetamente- pero ¿quien sabe este año  llega uno?- volvió a sonreír y el chico la miraba embobado- ¿sucede algo?-preguntó

-Es que me parece extraño que alguien como tú no tenga novio, pero eso es positivo- sonrió él- después del gym  ¿te gustaría ir por un jugo natural?, dicen los especialistas que después del ejercicio hay que hidratarse e incluso comer ¿Qué te parece?

-¿Eso dicen los especialistas o tú?- bromeó, en ese momento sonó el teléfono de ella-Disculpa- dijo - es una de mis compañeras de casa-sonrió- ¿Aló Mati?

-Hola, hoy haremos una barbacoa nocturna con los chicos, ¿Por qué no invitas a alguna amiga o amigo nuevo?- dijo con voz traviesa Matilda- ¿te parece?

-Excelente, me encantaría- contestó mientras que en su mente pensaba “que maravilloso, me llevare a Gustavo a mi casa y tendrá que ir su hermano por él, que mas detestable para Alonso que tenerme de futura cuñada” sonrió al chico- Okey amiga nos vemos como las 8, salgo del gym y me voy para allá un beso y cortó.

En ese momento Nickol miró a Gustavo quien la miraba de pies a cabezas y prácticamente se la estaba comiendo con los ojos.

-Tengo un pequeñísimo problema- dijo Nicko- quizás tú me puedas ayudar.

-Si puedo, obviamente- contestó Tavo (Gustavo)- ¿Qué necesitas?- la miró con curiosidad.

-Pues hoy en mi casa habrá una barbacoa- dio inicio a un coqueteo descarado- y mis compañeras de casa tienen novios- se acercó a él y comenzó a trazar un  camino imaginario por los pectorales y el abdomen marcado del chico- no quería rechazar tu invitación, pero se me ocurrió que seria una buena idea que fueras conmigo, además – lo miró directamente a los ojos- me encantaría conocerte más.- sonrió seductoramente dejando a su acompañante completamente estático- si no quieres ir, no es obligación, habrá otro momento- se separó de él.

-No, o sea si- tosió nerviosamente- si, me encantaría ir- respondió Tavo.

-Entonces seguiré entrenando- dijo ella- dije que llegaríamos como las 8 ¿es buena hora?.

-Excelente- contestó Tavo -¿Cómo sabias que aceptaría?- agregó.

-Pues tenía una corazonada de que podrías aceptar, y si no lo hacías pues podría golpearte otra vez ¿no?- bromeó-¿nos vemos en 40 min en la entrada?, hasta pronto- le guiñó un ojo.

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Se encontraban ambas parejas preparando una rica barbacoa en el quincho de la casa, tenían puesta una gran mesa en la terraza, llena de ensaladas, bebidas, jugos y vino.

-¿Alguien llamó a Nicko?- preguntó Mey

-Si- dijo Thomas- mi novia hermosa la llamó- agregó besando a Matilda.

-Dijo que vendría a las 8 y acompañada- contesto la chica-¡me encanta! Todo esto, hay tantas cosas por las cuales celebrar.

-Muy bien, por mientras hagamos un brindis- dijo Ignacio entregándole una copa de vino a cada uno de los presentes- Quiero hacer un brindis por la mujer mas hermosa que se robó mi corazón, te amo vida mía, estos días han sido maravillosos, el verano pasado fue el mejor verano de mi vida por que te conocí. Salud por Mey, que día  a día la amo más y más.

-Salud- contestaron Thomas y Matilda, mientras hacían chocar las copas y  Mey besaba a su novio.

- Bueno yo no me quiero quedar atrás- dijo Thomas- yo quiero hacer un brindis por Matilda, por aceptarme como soy, por querer darle un chance a esta relación y por hacerme sentir nuevamente cosas que creí que nunca volvería a sentir, y por hacerme sentir cosas que jamás sentí, te quiero preciosa mía- la besó.