Mi eterno amor de verano

Compromisos serios...

Maryorie estaba terminando de vestirse, el vestido azul a medio muslo y con mangas, resaltaban sus ojos azules y la hacía verse más adulta, un maquillaje sencillo, mientras se ponía sus tacones, sintió un olor a quemado y corrió hacia la cocina en donde el bello pavo que cocina, tenía una pequeña capa oscura.

-¿Problemas en la cocina?- dijo Ignacio entrando tras ella- Amor, ¿estás nerviosa?.

-Nerviosa es poco- confesó ella- vienen tus padres y los míos.

Luego de su reconciliación ambos decidieron invitar a sus padres por el día a la casa de Mey, con el embarazo y el futuro de ellos revolucionando todo, lo más sensato es que hicieran participe a sus familias en este proceso y además que se conocieran. Ignacio usaba unos pantalones color crema y una camisa azul, se la había puesto a propósito para combinar con Mey y dar una buena impresión a sus suegros.

-Tranquila cariño-abrazó el chico a su novia y acarició su espalda- debes relajarte, mis padres te adoran, y los tuyos a mi, ¿Qué puede salir mal?.

-¿Te has fijado que cuando uno dice eso, las cosas empeoran?- suspiró- pero dejaré que todo salga como deba salir- agregó.

-Tranquila preciosa- se separó de ella y besó su frente- las ensaladas y la mesa están listos, ahora, esperar que lleguen, con las indicaciones que le di a mi padre, no creo que se pierdan.

-¿Amor? ahora que lo recuerdo... nunca supe el nombre de tu padre- dijo Mey- sólo sé que tú madre se llama Sara.

-Mi padre se llama Peter- sonrió- amor no eres el único que olvidó el nombre se sus suegros- sonrió-¿creo que tu madre era Marcela... y tu padre Domingo?.

Su novia rio- mi madre es Marisela y mi padre si... se llama Domingo- sonrió.

En ese instante sintieron un vehículo llegar.

Show time- susurró Ignacio y cogió a su novia de la mano, para recibir a los invitados.

Alonso miraba desde el suelo a Nicko como estiraba su cuerpo, se abría de piernas, giraba, hacía invertidas, simplemente esa mujer lo volvía loco, "Iría hasta el fin del mundo con y por ella"- pensó y se dibujó una sonrisa en su rostro, la cual no paso desapercibida para su novia.

-¿Qué piensas?- preguntó ella.

-¿Por qué?- cuestionó él- nada. 

-Para ser nada y tú sonreír de esa manera, tiene que haber sido algo- contradijo ella.

-Que te amo y soy feliz junto a ti, eso me tiene completo mi amor- contestó Alonso- ven acá- la llamó, y Nicko fue hacia él y ambos se recostaron en el suelo mirando el techo- Me gustas, amo estar contigo y estoy pleno, no necesito nada más para ser feliz- habló él.

Nicko se acurrucó contra él, ella también se sentía plena, tranquila, afortunada- Eres el amor de mi vida- susurró ella- pensar que estuve con "pasteles" a los cuales rehabilité- sonrió- pensar que te negué, que estuve con tu hermano y luego caer en tus brazos Alonso Ferrada- se levantó y lo miró- no podía estar mas equivocada, eres lo que mi corazón necesitaba y me encantas- se acercó y comenzó a besarlo lentamente, poco a poco fue deslizándose hasta quedar sobre él.

Los besos rápidamente subieron de tono, el roce de ambos cuerpos los hizo que sus respiraciones se agitaran notoriamente.  Quiero hacértelo aquí- susurró Alonso entre beso y beso. 

La ropa de Nicko voló, dejándola completamente a merced de su novio, quién besaba y succionaba sus pechos, mientras que con una mano estimulaba a su novia. Ella mientras intentaba sacarle la ropa a Alonso. De pronto el timbre.