XIII: Hasta los treinta

1.2K 78 69
                                    

Ángela

Lo quedé mirando unos segundos y volví a sentir esa extraña tensión entre nosotros, que me dejaba helada últimamente.

—Yo también —le respondí finalmente, con una sonrisa, y lo volví a abrazar

Luego bajamos del escenario y nos unimos a Sol y Jenny que nos esperaban en la pista, entre otros amigos.
Bailamos un rato entre todos, tomamos unos tragos, y cuando la gente se empezó a ir, Agus se acercó a mi y me agarró de la mano para llevarme a un rincón.

—¿No estuvo tan mal al final no? —me preguntó con su mejor sonrisa

—Te juro que primero te odié mucho, pero cuando escuché la música y empezamos a cantar... muy cursi lo que voy a decir pero, todo lo malo desapareció —le devolví la sonrisa— a parte sabes que no me puedo enojar con vos por más que quiera

—Viste, tenemos que hacerlo más seguido entonces —negué con la cabeza con expresión de "ni se te ocurra"— ¿y qué onda hoy cuando llegaste? ¿por qué estabas con ese humor? —me preguntó lo que me imaginé que quería saber

—Nada, un mal día —fue lo primero que me salió y al instante me arrepentí porque se venía el interrogatorio

—¿Mal día? ¿por qué? tenía entendido que estabas súper feliz porque terminaste el proyecto, salieron con Sol...

—Si — lo interrumpí— pero bueno, después de eso volvimos a discutir con mi mamá por lo del viaje —mentí— pero no quiero hablar de eso, volvamos a bailar mejor

—Bueno, yo ya me quiero ir igual, estoy re cansado —apoyó la cabeza en la pared

—Ese cuento ya lo conozco —lo miré con una media sonrisa y él se rió— ¿queres que nos vayamos? yo también estoy cansada —asintió mientras hacía puchero— pero cada uno a su casa —lo señalé con el dedo

—¿Por que? —se quejó automáticamente— veni conmigo

—Está tu hermana Agustin

—¿Y qué tiene? ella está durmiendo en su ex habitación

—¡Igual! no nos vamos a encerrar en tu habitación con ella en la casa, si voy se supone que debería dormir en su habitación —no podía dejar de pensar en que Sol ya sabía lo que había entre nosotros y cualquier cosa extraña que viera iba a aumentar más su intensidad

—Bueno —dijo resignado y agachó la cabeza exagerando como hacía siempre que le decía que no— ¿cuando se iba mi hermana?

—¡Agustin! —le pegué en la cabeza pero no pude evitar reír— bancame que voy al baño y nos vamos yendo —le dije y me fui

Cuando llegué, me sentí afortunada de que estuviera vacío, generalmente el baño de mujeres solía tener una cola similar a la de mc donalds. Entré a uno, y segundos después escuché una voz conocida.
Por los zapatos que llegaba a ver, era Yenny y estaba sola, así que seguro hablaba por teléfono.

—No sé todavía si voy a casa mamá, capaz me vaya con Agustin, pero te aviso... ok dale, besos —dijo y seguido escuché que cerró la puerta de uno de los baños

"Ya quisieras" pensé y aproveché el momento para salir sin que me vea.

—¿Vamos? —pregunté ni bien volví a la ronda donde estaban Agustin y Sol

—Dale —dijo ella y empezó a caminar

—¿La vieron a Yenny? porque no la salude —preguntó Agustin y justo en ese momento apareció ella

—¿Ya se van? —preguntó y nosotros asentimos

—¿Queres que te lleve? —le dijo Agus— estoy con el auto

Nuestros silencios - ANGESTINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora