LA FAMA QUÉ NOS UNIÓ.

Capítulo. 71 - Pequeño Cookie.

POV Seokjin

Me encontraba en mi oficina haciendo unas llamadas encargando más productos de limpieza para los cubículos del restaurante, concentrado en mi trabajo, hacia cuentas y cosas de más para asegurarme de no gastar más u olvidar algo, cuándo terminé deje la pequeña libreta aun lado y estiré mis manos, miré el reloj en el escritorio y pude ver que era la 1:30pm.

El teléfono en el escritorio sonó, rápidamente atendí la llamada.

—Si, diga..–

—Jin...diculpe que lo moleste, Jimin y él pequeño Jungkook llegaron a la recepción, ¿quiere que los acomode en una mesa especial.–

—No espera Hyuna, en un momento salgo, yo los llevaré a su mesa, gracias por avisarme.–

—De nada, les diré que lo esperen entonces.– colgó la chica.

Jin colgó la llamada y se levantó estirandose un poco para tronar los huesos de su espalda que dolían un poco debido a que tenía horas en la misma posición. Salió de su oficina y caminó por un pasillo algo angosto pero elegante; decorado con varios lienzos echos a mano  con óleo y decoraciones dándole un toque sofisticado, a pesar de ser un lugar exclusivo para el personal, era muy lindo.

Bajó las escaleras hasta llegar a la recepción dónde miró a su mejor amigo recargado en el mostrador y a Hyuna cargando a Jungkook haciéndole cariños y dándole un beso en la mejilla dejándole aquel beso marcado debido al labial rojo.

El castaño se acercó y Hyuna bajó con cuidado al pequeño que al ver a su padre corrió hasta él abrazandolo.

—¡¡Papi!!–

—¿Cómo te fué amor?, ¿que tal tu primer día de clases?–Se agachó hasta quedar a la altura de Jungkook mientras lo sostenía de sus hombros con delicadeza.

—Bien, papi jugamos con la maestra y también hicimos un dibujo con muchos colores.–hablaba emocionado contando cómo le había ido.

—Que lindo, papá está feliz de qué te hayas divertido, ¿tienes hambre?–

—Sí, pero ¿puedo ver a tío Bobby, tío BM y tío idow?–

—¿Tío idow?–comenzó a reír un poco al ver que a su pequeño se le dificultaba mucho decir E'Dawn...después de todo era sólo un niño.

—Si...quiero verlos, quiero jugar con ellos, traje mis carritos.–Hizo un puchero.–

—Amor, están trabajando, no podemos interrumpirlos, te prometo que si se desocupan les diré que pasen a verte ¿ok?.–

—Esta bien...–hizo un pequeña mueca y luego volvió a sonreír.

—¡Hay pero si este niño es un amor!–Habló la peli roja encantada.

—Verdad que si, es un pequeño conejito..–Sonrió Jimin.

Jin volvió a levantarse tomando a Jungkook de su pequeña manita. —Vamos Jimin los llevaré a una mesa privada, para que comamos ahí, hoy los acompañare también, saldré en una hora dejaré al gerente a cargo.–

—Genial, pero... ¿Seguro que está bien una mesa privada?, bueno...creí que comeriamos en una de estas dos  mesas vacías.– señaló las dos mesas más sercanas.

—No, elegí una porque así Jungkook y tu pueden estar tranquilos y también así él podrá jugar por toda la habitación del comedor privado sin molestar a los clientes.–