Nova Love

Capítulo 33

Kristal

Lo sigo, su mirada aun lo hace ver un poco molesto. ¿querrá hablar sobre lo que pasó?

En cuanto llegamos a la azotea cierra la puerta y se recarga en el barandal que hay en la orilla. Alza la vista y me sorprende mirándolo, el viento golpea muy fuerte despeinándome, por lo que tengo que sostener mi cabello con una mano para evitar que entre en mis ojos.

Me mira sin decir nada, sus ojos que son casi como el color de la miel se centran en mi rostro, su cabello de él también revolotea y juro que se ve increíblemente bien ahí recargado, como me gustaría hacerle una foto en este instante. Pareciera un modelo de esos que encuentras en revistas.

—Lo siento— las palabras suenan demasiado rápidas y de forma atropellada.

Lo miro y parece que le ha costado bastante.

— ¿Qué?

—Vamos Kris, que si me has escuchado— suspira y se mueve de su lugar hacia la puerta. Se nota muy nervioso—. Tienes que saber que tengo un temperamento de lo peor y mi carácter no me ayuda tampoco.

—Lo he notado— le digo mirando hacia mis manos.

— ¿No estás molesta?

—Solo quiero saber, ¿Cuál ha sido la razón?

Él niega con la cabeza.

—No puedo hacerlo, simplemente ha sido algo estúpido. No quiero joder las cosas contigo. Lo juro. Simplemente tenme un poco de paciencia. No te aseguro que pueda cambiar de la noche a la mañana, pero...

—No quiero que cambies, con carácter horrendo o no, tú me gustas— le suelto y mis manos comienzan a temblar al igual que comienzo a sentir la sensación recorrer mis terminales nerviosas.

Sonríe y comienza a acercarse hasta mí.

—Eres muy testaruda. ¿lo sabes? Por querer soportar un carácter como el mío.

Me alzo de hombros y le sonrío.

—Y tú eres un gruñón, pero si nos ponemos a decir lo que somos o no, nunca vamos a terminar.

— ¿Ah sí? — pregunta acercándose más—. Yo puedo decir que eres muy bonita y que me encanta cuando sonríes.

Me pongo nerviosa y no sé muy bien que hacer.

—Tu... tu...

—Yo te gusto— arquea una ceja y se muerde el labio superior provocando un cosquilleo en mi estómago.

—Bastante— me levanto sobre la punta de mis pies y estampo mis labios contra los de él.

Siento sus brazos rodear mi cintura y me atrae hacia él, respondiendo aquel beso. En un principio es tierno y cálido, pero cuando su lengua se pasea sobre mi labio superior la sensación me arrasa con fuerza. Y en seguida siento calor, algo se incendia en mi nuca.

Mi mano recorre su espalda y mientras baja lo veo estremecerse y atraerme aún más, siento su pecho junto al mío, al parecer no soy la única a la que su respiración ha salido disparada.

—Kris...— susurra en mis labios y sus manos que estaban en mi cintura ahora comienzan a descender.

Mi boca en respuesta se mueve más rápido y es como si necesitará sentirlo aún más cerca, parece que lo siente porque sus labios se vuelven más insistentes y cuando jala de mi labio inferior con sus dientes un gemido sale de mi boca.

Él se aparta, y mis ojos se abren para verlo respirar profundamente, sus labios están hinchados y rojos. Me muerdo el mío y trato de acompasar mi respiración.