Nova Love

Capítulo 46

Kristal.

Jessica tenía razón, los días iban a pasar volando...

—¿Llevas tu cepillo dental?

—Si...

—¿Tangas?

—...

—¿Desodorante?

—¿Ligueros?

—¿Toallas femeninas?

—¿Condones?

Mamá mira con mala cara a Jess ante sus preguntas. Comparadas con las de ella no han sido agradables para mi mamá.

Jess sonríe y alza las manos.

—Solo estaba bromeando.

—Pero ¿si los llevas? — pregunta mamá rebuscando alguna cajita.

—¡Mamá! — le digo impidiéndole revisar mis cosas.

En especial porque Jess me ha regalado algunos conjuntos... provocadores. Ni siquiera sé cómo me ha convencido.

—Está bien, tienes razón. No los necesitas— dice mamá tratando de no mirarme.

—Claro, allá también hay farmacias— dice mi amiga guiñándome el ojo y mirándome acostada boca abajo sobre la cama.

Suelto una risa y niego con la cabeza.

—Estás loca.

—Ok, creo que llevas todo, ¿has guardado el pasaporte y dinero?

—Si, mamá. Voy a estar bien, no te preocupes.

—Es solo que... es la primera vez que viajarás sola y tan lejos...

—Mamá ya conoces a los chicos, nada malo va a pasarme.

—Tienes razón— dice colocando la mano sobre su pecho—. Mañana partiremos al amanecer, así que será mejor que vayamos a dormir.

Hoy tendremos una especie de pijamada, ya que mamá pasará la noche en el apartamento con nosotras para que pueda llevarme al aeropuerto.

—¡Apenas son las ocho! — se queja Jess rodando sobre si—. ¿No podemos salir a cenar?

El timbre suena y mi amiga se levanta de un salto.

—Ya voy.

—¿Segura que no necesitas más dinero?

—En serio no mamá, he ahorrado bastante y con lo que he ganado con las asesorías me es suficiente.

—Vale— dice ella aun notándose nerviosa—. Mas te vale que me llames a todas horas.

Asiento y la abrazo, entonces la veo dudar y sé que quiere decirme algo. Así que la animo con la mirada.

—Tranquila, voy a estar bien...

—Kris... si decides no volver...

—¿De qué hablas? — me río, pero veo que va en serio.

—Yo también fui joven, hace muchos años— dice sentándose en la orilla de la cama e indicándome que la imité—. Pueden pasar muchas ideas por tu cabeza, pero trata de pensar en lo correcto, ¿entiendes? Sabes bien que a mí no me interesa un título de universidad o que termines una carrera, o decidas ser vagabunda.

Me río por lo último.

—Solo quiero que seas feliz y confío en que en lo que hagas, será porque te hace sentir plena. ¿Ok?