Kristal.
—Hermanos no me lleven a casa, mamá está en un re— re— re...
El vómito de David le impide hablar. Esaí niega con la cabeza y se sostiene el puente de la nariz con dos dedos.
—Hoy tiene una reunión familiar— explica Teo colocando a David en la orilla de la banqueta—. ¿Qué hacemos?
—Llevarlo a casa— dice Esaí poniéndose el teléfono en la oreja—. ¿Mamá?
Después de veinte minutos un coche azul aparece doblando la esquina. Hace frío y tiemblo, Eiden lo nota y se quita su chaqueta para ponérmela en la espalda y frotarme los hombros.
—Ustedes no pueden pasar ni un solo fin de semana sin buscarse pleito— una señora que parece de la edad de mi abuela baja del auto.
Lleva una larga cabellera castaña atada en una media coleta, sus ojos son color esmeralda y aunque no usa ni una sola gota de maquillaje se nota que es muy guapa. Sus ojos se detienen en mí y entonces los mira.
—¿Y esta chica? ¿Te han robado estos imbéciles? — pregunta acercándose a mí.
Niego con la cabeza y trato de sonreír.
—Soy Kristal— extiendo mi mano hasta ella.
Me contesta el saludo, pero me mira pensativa.
—¿Kristal? ¿Por qué me suena el nombre?
—Es la chica que conocimos en el extranjero— dice Teo sonriendo.
—Oh— dice ella y en seguida mira a Esaí—. Esta es la chica.
Esaí parece querer que la tierra lo trague y mira a su madre con nervios.
—Si, si ella es la novia de Eiden, ya te lo había dicho, ¿recuerdas?
—¿No es la misma chica que dijiste que te...
—¡Señora! Buenas noches, disculpe mi estado— David se para, contoneándose de un lado a otro—. Pero... ¿podría brindarme asilo por una noche?
Ella lo mira con gesto serio.
—¿De nuevo David? ¿Qué va a decir tu madre? Que soy tu tapadera.
Él la mira con gesto angelical y ella rueda los ojos.
—Suban al auto— nos dice.
El camino es silencioso, exceptuando las arqueadas que sufre David de vez en cuando.
—Yo pienso que esta debe de ser la última vez que lo dejamos beber tanto— dice Teo sosteniendo la cabeza de David fuera de la ventana.
—Yo estoy contigo— dice Eiden sosteniendo mi mano y acariciándome.
Yo recargo mi cabeza sobre su hombro y suspiro.
—Vaya primera noche la de Kris— se ríe Teo mirándome—. Siento hacerte pasar por todo esto.
—Está bien, hace mucho no me divertía así.
Cuando llegamos hasta la entrada de casa de Eiden, bajamos del auto, pero Teo me detiene.
—Eh Kris, quería preguntarte algo— dice moviéndose de un lado a otro—. ¿Cómo está Jess?
La pregunta me sorprende, ¿será que este ebrio?
—Bien...
— ¿Ella... todo está bien con su madre?
—Si, bueno, después del baby shower no la ha vuelto a ver.

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Nova Love
عاطفيةComo el colapso de una estrella que se libera sin medir consecuencias... así ocurrió en mi interior el brillar a su lado, "brillar" de manera inestable y por breves instantes. Igual que una nova, pero la explosión solo destruye o altera a la estre...