cap 31

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el gran día llego, la joven pareja de tórtolos fueron obligados a dormir en casas distintas, a pesar de ya vivir juntos.

la boda del año seria casi como yuuri imagino desde pequeño, obvio algunos cambios del yuuri del futuro; lo primero era que nunca se había imaginado que tantos reporteros y personas hicieran un completo escándalo acerca de esto, después noto que se encontraba casándose con uno de los dos solteros mas cotizados de los últimos cinco años, un alfa que contaba con admiradoras por montón, patinador artístico sobre hielo ganador de mas medallas de oro que amigos, un actor y una belleza escultural, o al menos eso decían algunas cuantas revistas de todas en las que salia su ya casi futuro esposo, de cierta manera lograba ponerle nervioso aunque lograba calmarse al saber que no se estaba casando con ese alfa si no con el amor de su vida, con el que le ayudo en sus peores momentos, en el que daba su vida por el, con el que correspondía sus sentimientos.

en esa noche yuuri no había podido dormir del todo bien, al amanecer se encontraba emocionado, listo, ya quería que fuese su gran hora, era su gran día; se encontraba en un lujoso hotel de Italia, cómodo y listo para lo que el necesitaba, a la primera hora llego su madre, su hermana, su suegro bruno, con el cual había congeniado mas que bien, su mejor amiga minako y chris, rápidamente comenzaron con abrazos y felicitaciones directas.

la boda comenzaría en la iglesia gótica de Italia, después se daría inicio a la ceremonia tradicional japonesa y por ultimo el banquete de recepciones donde se daría lo ultimo que seria una boda legal para luego comenzar con el banquete de tres tiempos, una sopa típica rusa, un platillo fuerte alemán y un postre japones el cual yuuri también esperaba con ansias, todo perfectamente en horarios.

comenzaron con un pequeño desayuno para tranquilizar al omega, después comenzaron con los arreglos, el primero fue yuuri, con un tenue maquillaje de base y en sus labios un labial rosa, pestañas enchinadas y un broche azul en forma de mariposa el cual hiroko había puesto y no había podido evitar soltar unas cuantas lagrimas mientras lo hacia. se coloco un vestido de omega y se miro frente al espejo, en ese momento volvió a ser aquel pequeño de cinco años, aquel pequeño que corría por las aguas termales con un pedazo de tela sobre su cabeza mientras buscaba a su madre para enseñarle su velo echo de papel higiénico, en esos momento quería llorar, su vestido, su cara, su velo real que lograba arrastrar por toda la habitación, era un sueño.

en la habitación de viktor se vivía otro mundo, el alfa tampoco había logrado conciliar el sueño perfecto, viktor se encontraba con ambos pequeños los cuales se habían dormido hasta tarde llamando a su madre; cuando estos por fin habían caído rendidos hasta la pesada noche viktor sonrió y tomo su celular, era top en twitter, instagram y muchas paginas de chismes, a el alfa de antes le hubiera encantado ver aquello, ser nombrado en miles de lugares por una simple boda, pero al viktor de ahora no parecía importarle, tomarlo a menos, aunque eso le hacia sentir feliz, mirar como aquel omega lo había cambiado por completo.

a la mañana siguiente, en su habitación llegaron su padre alek, el amigo de yuuri, pichit, el cual por petición del omega habían empezado a convivir y llegado a ver que serian muy buenos amigos. tal vez eran pocos pero eran la mejor compañía.

comenzaron bañando a los pequeños y arreglándolos, tal vez la tarea mas dura, ambos menores con un traje blanco previamente escogido por yuuri, después siguieron los adultos colocándose los trajes ya escogidos y arreglando levemente su cabello.

la hora exacta dio, los invitados dentro de el resinto religioso, era perfecto, hermoso y gotico; como primero pasaron los dos pequeños de yuuri y viktor tomados de la mano de pichit y mari, tras de ellos fue recibido el sacerdote y luego viktor. cuado todos se encontraba en pocision dio inicio la macha nupcial tocado en un gran organo de aquella iglesia, todos se pusieron de pie y recibieron al omega, las camaras no perdian ningún momento para tomar fotos, videos, conforme yuuri avanzaba viktor no podia evitar sonreír y saltar de la emocion sacando risas de los invitados y quitando un poco de miedo en yuuri; el omega fue entregado en el altar por su madre la cual aprovecho a decirle a viktor que cuidara de su pequeño por la vida, todo el sonido callo y la pareja tomó sus manos para mirarse fijamente, el sacerdote aclaró su garganta y leyó un gran libro.

-amigos y familia, estamos hoy reunidos en este lugar para unir en santo matrimonio a esta pareja de omega y alfa por la eternidad, antes de proseguir con la ceremonia debemos preguntar, alguien se opone a este sagrado matrimonio?, hable ahora o calle para siempre- expreso

En esos momentos yuuri se tensó, un escalofrío recorrió su espina dorsal, se acordó de él, sentía miedo de que entrara y su vida volviese a aquel abismo del cual alguna vez ya había tapado; el peor minuto de la vida de los novios, al final el sacerdote volvió a aclarar su garganta y prosiguió.

-el amor que nos comparten esta pareja deberá durar para la eternidad, al no haber quien se oponga y por el sagrado poder que me confiere la sagrada ley estoy feliz de nombrarlo omega y alfa, puede besar a su pareja- expresó el sacerdote

Viktor tomó a yuuri de la cintura y empujó el cuerpo del menor hacia el pegándolo así a sus labios, de fondo todo se llenó de aplausos y gritos de felicidad, los novios voltearon a ver al resto de personas y tomando a sus pequeños de las manos corrieron hacia afuera mientras les arrojaban pétalos de flores rosas y azules, tan mágico. Así concluyendo la primera ceremonia.

Entrando a la limosina se dirigieron hacia el segundo respingo donde sería efectuada la boda japonés, la pareja de tórtolos reía y abrazaba felices en familia, era perfecta. Los invitados eran llevados por otras limosinas que contrataron los novios.

En el siguiente recinto yuuri y Viktor cambiaron sus trajes por algo más típico japonés, al igual a sus pequeños por unos quimonos, afuera de donde se encontraba cambiándose la joven pareja ya se escuchaban voces, de sonreían mutuamente y salieron de aquel lugar haciendo acto de presencia.

quiero aclarar que yo nunca e visto una boda japonés típica ni mucho menos, así que lo siguiente estará sacado a la imaginación, sorry...aunque tal vez también se interprete un poco como la boda de hosik y sunbae, ósea coreana

Los novios pasaron por le pasillos luciendo hermosos quimonos llenos de imágenes y colores. Llegaron frente de todos los invitados luego comenzó la ceremonia, yuuri se cubría con un abanico mientras Viktor hacía lo mismo y se miraban mutuamente, no podían evitar reían ante la mirada del otro, eran el nerviosismos y la adrenalina. La ceremonia prosiguió con éxito hasta la parte en donde todos comenzaron a gritar y celebrar de emoción, ahora tocaba a Viktor presentar a yuuri como su esposo. Se levantaron y Viktor tomó la mano de yuuri mientras  daban una pequeño recorrido por el recinto y lo mostraba.

Todo aplaudieron y después todo pasó a seguir en la recepción, las cámaras y programas de chismes no paraban de seguirlos, todo era perfecto, solo faltaría la última y al fin podrían decir que esto sería eterno. Rumbo a el último salón decidieron ver las noticias, su boda era la mencionada del momento por el mundo, miles de países lo traducían, lo mostraban, era tan grande y conocida; en una repetición de ella yuuri vio como ambos sonreían y tomaban de sus manos saliendo de la iglesia gótica, se veía tan hermoso, sentía tantas ganas de llorar.

-te amo- expresó yuuri de la nada y Viktor lo volteo a ver también sonriente y lo beso

-yo te amo aún más- expresó entre ese beso

La joven pareja volteo a ver a sus pequeños y estos se encontraban emocionados, el pequeño yurio sonreía mientras señalaba de un lado a otro hablando con su hermano y el pequeño jean parecía no entender pero aún así miraba hacia los lados que su pequeño hermano rubio le enseñaba.

Llegaron al lugar y pasaron antes que los invitados llegarás, Viktor volvió a colocarse su traje negro mientras yuuri se colocaba un hermoso traje blanco pegado a su cuerpo delgado, Viktor se relamió los labios y sonrió besando tiernamente la mejilla de su amado a lo cual yuuri sacó sonrisitas, los pequeños también se les cambió de ropa poniéndoles así de nuevo sus trajes.

Los invitados entraron y justo asi también los reporteros, todos siendo recibidos por la pareja, no tardó mucho en llenarse ese gran lugar de un ambiente relajado y feliz, todos deseando felicidad a los novios y buena salud a los pequeños además de dar sus regalos.

Cuando todos terminaron de llegar dio inicio su última ceremonia, se colocaron en medio de la pista, a vista de todos y firmando un papel dio por concluido que su amor sería eterno, que no hacía falta nada más, que eran felices y lo demostraban, la música comenzó y dio inicio el vals de los novios, estos parecían volar por los aires en su pequeña nube de amor, todo parecía perfecto, las luces, sus ojos, sus bocas, sus corazones unidos, perfecto, no?.

El patinador tras la bestiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora