Mis Víctimas #2

42. Mis Niñas

Seth.

Estaba hecho y de aquí no había vuelta atrás, de esto dependía mi futuro, también el de mi prometida, solo así podríamos salvarnos de la desgracia de vida que nos tocó.

— La gente como juzgara esta decisión, ya lo veo venir— sabía que eso pasaría en cuanto supieran de nuestro matrimonio— más si tomaras el poder más grande para los Blanchard.

— Siempre juzga la gente, no será necesario dar explicaciones, hay tantos factores que pudieron llevar a este matrimonio, como la religión, algún embarazo, hasta amor el cual se cree menos, aunque imagino que en cuanto mi nombre sustituya el de mi padre sabrán que pudo ser una razón para casarnos.

— Los que te conocen bien sabrán el por qué, ya que religión no es lo tuyo, tener relaciones sexuales tampoco lo es, amor mucho menos— si que sabía que de lo que hablaba— lo más razonable después de todo lo que ha sucedido es que lo hiciste por el poder.

— La gente hace de todo por el poder, yo no tuve opción, si me hundía me llevaría a Thom y a ti conmigo. No podía permitir algo de esa manera, les dije que los mantendría a salvo.

— ¿Qué le dirás a tu padre?

— Obviamente no puede saber de esto, nos lo impedirá, según yo no sabe cómo puedo obtener el liderazgo, aún así no lo vería para nada correcto, sabe que no tengo razones y no es tonto, de inmediato lo relacionará con el puesto de líder.

— Eso me suena a que nos casaremos en secreto— era lista como para saberlo— es una gran tristeza que no podré tener una boda toda bella.

— Eventualmente cuando quedes libre de ese horrible puesto donde te dejó tu padre y nuestro hijo sea recibido con el poder, podrás buscar a alguien quien ames, de esa manera tendrás la boda que deseas.

— ¿Me darás el divorcio tan fácil?

— Mi plan no es hacerte pasar toda tu vida conmigo, no mereces tal desgracia, se que no me quieres de manera amorosa como para verme con pareja, no impediré que busques el verdadero amor.

— ¿Qué será de ti una vez que eso pasé?

Esa era una excelente pregunta, no sé qué sería de mi vida para ese entonces, ni en este momento sabía en que se había convertido. Mis planes no salieron como esperaba y aquí ya estaba improvisando para sobrevivir, no tenía un plan para el futuro, primero debía completar la primera parte para obtener el poder, ya de ahí me las arreglaría para pensar en algo.

Puede que en algunos años aún esté a tiempo para buscar otra oportunidad con Crystal, tal vez en aquel tiempo ya no forme parte de la mafia si logro completar mi venganza. Así no tendría que ocultarle nada, sería feliz sabiendo que le soy sincero, solo sería el líder.

Ya no sería la sombra, sería el rey.

Siendo líder tendría toda la atención, sería más complicado seguir en la mafia y que mi rostro fuera conocido. Entrando en ese puesto se iría la privacidad con la que siempre conté, por eso no planeaba tomar mi poder hasta que terminara con Devil.

Pero las cosas nunca salen como las planeamos. Mucho menos en esta familia.

Habíamos caminado bastante al estar conversando sobre lo que sería nuestro futuro, pero era tiempo de regresará a la mansión para vestirme. Sabía que Shantal no estaría mucho aquí antes de que mi padre se la llevara a otro lugar.

— Cambiando de tema— recordé una de las principales razones por la que salí— ¿Tienes algún celular contigo?

— No, tu padre se encargó de quitárnoslo.