9. Anillo

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Se siente tan raro volver a clases, aunque más extraño es ser una mujer. Necesito practicar coquetear con chicos ¿Quién será más fácil que Cruz? O al menos alguien que me interese y no me dé repugnancia. Estoy tan desinteresado en tener pareja que esto parece más difícil que matar a mis agresores. Aunque eso no sea cierto, es como me siento en este momento.

—Shirley ¿Verdad? —Alzo la vista, permaneciendo en mi asiento, viendo que mi amigo de la infancia me habla —Soy Blade —se presenta —. Nos conocimos en circunstancias raras, me disculpo —expresa tan amable como siempre.

Sonrío.

—No hay problema ¿Cómo está tu hermana? Espero que mejor.

Asiente.

—Sí, solo se pasó de copas —Hace una pausa —¿Puedo hacerte una pregunta?

—Adelante.

—¿Está todo bien?

—¿Disculpa? —Alzo una ceja.

—Sí, me refiero a... primero Cruz te acosa, luego el otro te llevó, parece que te metes en muchos problemas, deberías tener cuidado.

—Estoy bien —le afirmo —¿Y tú?

—¿A qué te refieres?

—Hablaban de muerte la otra vez.

Suspira.

—Sí —dice triste —. Mi amigo murió y me da mucha rabia que Cruz se burle de eso —expresa frustrado presionando el puño.

—¿Sabes qué pasó con la investigación?

—Eso me frustra todavía más —Bufa —¿Cómo es posible que la hayan frenado? ¿Qué clase de justicia es esa? Fue hace muy poco, para mí que hay algo muy raro en todo eso —Reacciona —¡Oh! Lo siento, te estoy contando como si supieras y recién llegas, es que cuando se habla de Sirl, todavía no puedo creer lo que ocurrió —Suspira.

—Estoy... un poco informada —me invento —. Así que te entiendo.

—Gracias —Sonríe y luego mira la hora en su celular —. Bueno, me iré a mi asiento, espero poder seguir hablando contigo luego.

—Claro —Asiento y veo como va a sentarse, preparándose para la materia.

Frunzo el ceño cuando visualizo entrar a Cruz al aula, me mira y solo hace una señal de saludo. Parece que no lo hechicé realmente, porque ni me pregunta cómo estoy. Se va directo hacia su novia, le da una palmada en el trasero y ella lo mira mal, luego de su mochila saca una cajita, entonces Marilyn se emociona.

—¡Oh por Dios, es el anillo que quería! —chilla la pelirroja —¡¿Cómo lo conseguiste?! ¡¡Es muy caro!! ¡¿Robaste un banco o qué?! —sigue gritando emocionada.

—Al fin me pagaron un trabajito que hice —expresa y me quedo tildado.

No... no puede ser, no creo que tenga que ver con lo mismo. Deja de delirar, no puedes mezclarlo todo con lo que ocurrió. Mierda, estoy lleno de rabia. Él festeja mientras yo sufro y lo peor es que Marilyn sigue siendo su número uno, sino no le regalaría cosas. Necesito practicar, obtener experiencia rápido y así conquistarlo, para luego sacarle toda la información necesaria.

Me levanto de mi silla y camino hasta Blade, me siento a su lado.

—¿Te gustaría salir esta tarde? —le pregunto.

Él sonríe.

—Claro ¿Por qué no?

Si voy a practicar necesito algo fácil y yo conozco todo sobre mi amigo, así que lo siento Blade, pero necesito tu ayuda.

Venganza InmortalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora