«RIN; SE NCT» #3

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En la casa Dream había una regla muy importante que pronto terminó siendo copiada por 127, y era que, antes de entrar al baño, había que tocar la puerta, o comprobar por el borde si la luz de dentro estaba encendida. Nadie sabía por qué había una raya en la puerta, pero era lo suficientemente grande como para saber si había luz dentro, y lo suficientemente pequeña para que nadie llegara a ver el interior.

Práctico, muy práctico.

El problema era que Rin no encendía la luz.

Rin era de esas personas que no tienen la necesidad de encender una luz para estar perfectamente por la estancia. Bien se podría estar dando un baño o depilandose, que no encenderia la luz a no ser que de verdad no se viera ni una mierda.

Y eso era un problema teniendo en cuenta que Rin no vivía sola, sino que vivía con más de una docena de chicos al rechazar el vivir con GG.

Rin cerró tras ella la puerta del baño, más no encendió la luz, conforme con la poca iluminación que entraba por la ventana alta del baño. ¿Para qué más luz? Solo iba a darse una ducha, lo único que necesitaba era agua y jabón. Además de que estaba sola en la casa Dream, por lo que no se quejarían por ella no haber encendido la luz.

Rin entró a la ducha, dejando la ropa colocada a un lado y la toalla lista para taparse nada más salir del agua. Suspiró en cuanto abrió la llave del agua caliente, y la reguló con el agua fría para no morir abrasada.

— ¿Rosie, estás en casa? Roosie.

Mark canturreó su nombre mientras se quitaba los zapatos. Según los Dream, cuando él hacía eso, cuando él la llamaba a ella nada más pisar el departamento, y como ella le saludaba inmediatamente, decían que parecían una pareja de casados.

A Mark le pareció extraño que ella no respondiera cuando sabía que estaba en la casa, pero supuso que estaría dormida o habría salido con los hyungs, por lo que no le tomó demasiada importancia y fue directamente al baño más cercano para orinar, sintiendo que su vejiga podría explotar en cualquier momento.

Abrió la puerta del baño sin más, y escuchó un chillido. Él se giró, y chilló también.

— ¡VETE, VETE!

— ¡TÁPATE YO VOY A MEAR!

— ¡VETE A OTRO BAÑO!

— ¡RENJUN HA CAGADO ANTES DE SALIR, ESO ES PEOR QUE CHERNOBYL!

— ¡MARK LEE!

Lo primero que sintió cuando hizo el gesto de ir a desabrocharse el pantalón, fue que un champú le impactó en la espalda con fuerza. Después de eso, le siguió un gel que estaba seguro que era el gel especial de Chenle.

— ¡ROSIE QUIETA!– gritó, sintiendo ahora un desodorante caer en su estómago.– ¡ROSIE, PARA O TE PARO!

— ¡LÁRGATE!

— ¡ROSIE!

Otro champú cayó cerca de su cara, y él cogió una toalla para lanzarsela a la cara, importandole poco y menos que ella estuviera desnuda, y él con el pantalón desabrochado y algo bajado.

— ¡MAKKU, PARA!

Rin siguió tirando geles hasta que se quedó sin ellos, y procedió con los champú. Mark ahora odiaba que cada uno usara uno diferente y de varios tipos para proteger su cuero cabelludo contra los tintes, porque tenía a una loca desnuda tirándole botes. Claro, él tampoco debía parecer muy normal devolviendo los golpes pero tirándola toallas y el jabón de manos.

Hasta que pasó. Ambos quedaron en silencio cuando el bote de champú de Jaemin impactó en la frente del canadiense. Rin parecía no esperarse que fuera a impactar ahí, y él estaba demasiado sorprendido y adolorido para reaccionar de otra manera.