«RIN; SE NCT» #3

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— ¡HEY, NCTZEN!– chilló Rosie por el micrófono, recibiendo una ola de gritos en el estadio–. Hoy es una linda noche, ¿no creéis? – suspiró, mirándose a sí misma en la gran pantalla del estadio–. Hace poco recibimos unos premios que jamás creeriamos – recordó la sorpresa cuando se anunció a NCT127 como artista del año, a NCT Dream como mejor álbum y a WAYV con el premio cultural. NCT-GG, por otro lado, tuvo la suerte de recibir mejor artista femenina–, nuestros chicos están felices, y os podemos ver y cantar con vosotros.

— ¡Unnie se pone sensible! – chilló Chaewon, apoyada en el hombro de Akira. Varios de los chicos corearon, riendo.

— Dejadme hablar, animales – carraspeo–. Hoy es un día especial, porque hoy acaba nuestra gira mundial como NCT al completo, y no hay nada que me emocione más. Muchas gracias por apoyarnos por tantos años, por querernos y darnos las fuerzas que nos faltaban en ocasiones. ¡Incluso por ayudar a Taeil oppa y Sowon unnie a elegir un nombre para un futuro bebé!– rió, recordado como el hashtag #MoonBabyName se había hecho tendencia mundial, sugiriendo nombres para un bebé en cuanto se enteraron del matrimonio–. Sois geniales, NCTzen, ¡os amo!

De un momento a otro, Lucas gritó anunciando un abrazo grupal, y todos se lanzaron sobre ella, mandando a volar el micrófono. Esa era su familia, más de veinte deficientes mentales que ponían cuerpo y alma en aquello que más les importaba, y que harían cualquier cosa por su familia.

— ¡Rosie y yo nos vamos a casar! – chilló de la nada Haechan, causando caos en el estadio.

— ¡LEE DONGHYUCK!

Su cara fue convertida en meme en cuestión de horas.

...

— Ahora la sorpresa está arruinada – doce malditas horas del concierto y ahí estaba Johnny, riendo como desquiciado mientras veía por Twitter las reacciones y memes por la noticia que había soltado de la nada Haechan. ¡Se suponía que harían un VLive sorpresa! Ahora la noticia estaba en la mierda–. Hey, este es bueno, mira – rió, enseñando el teléfono, aunque Rin se le arrebató y le tiró al sofá de enfrente–. Bueno, tampoco había que tirarle.

Mientras Johnny se levantaba de nuevo a por su móvil, alguien llamó a la puerta, algo estúpido ya que estaban en la salita de descanso de la empresa para hacer un último VLive y así terminar con la gira de una vez.

— ¿Estás enfadada?

Johnny fingió seguir viendo cosas de Twitter, aunque tenía los ojos y oídos atentos a ambos. Era un cotilla de primera, aunque sabía guardar secretos.

— Eres un... – cogió aire, buscando las palabras, pero Haechan se sentó a su lado y apretó sus mejillas para que soltara el aire retenido–. Se suponía que iba a ser sorpresa – terminó por quejarse–. Eres un bocazas.

— Oh, mi bebé está enfadada – hizo voz tierna, tirando de su mejilla–. Igualmente será pronto, y el VLive será sorpresa, ¿qué idols dementes hacen VLive para que las fans vean algo de la boda?

— Bueno, Hyuna y...

— Ya, ya – negó–. Eso fue extraño pero bonito, aunque nosotros somos aún más extraños y el triple de preciosos – Rin rio–. Oh, te he hecho reír, ¿ves? Es imposible enfadarnos.

Johnny tosio falsamente.

— Ejem, Navidad, ejem.

Oh, sí, eso sí fue una buena pelea, empezada por algo tan absurdo como que Haechan creía que se había olvidado de su regalo, lo que hizo que Rin se cabreara al él ir soltando más cosas insinuando que era una mala novia, ella empezara también a reclamar más cosas y por culpa de la menstruación presente en Rin, ella acabara llorando al él alzar la voz. No se hablaron hasta Año Nuevo, que fue para volver a discutir y, al final, reconciliarse cuando empezaron los fuegos artificiales de celebración. Todos creían que la feliz y cariñosa pareja iban a cortar, pero acabaron aún más unidos.