«RIN; SE NCT» #3

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— Tengo un problema, chicos – la cabeza de Rin se asomó por la puerta, dejando ver el maquillaje y el peinado de prueba para la gala.

Todos la miraron, preguntándose qué la pasaba. Era raro verla ir a ellos en busca de ayuda. Una vez, para no ir en su busca para abrir un tarro, ella le rompió. Oh, y la vez en la que no alcanzaba un vaso y movió hasta el sofá para no tener que pedirlos nada. Era una orgullosa, de eso no cabía duda.

— ¿Qué pasa?– preguntó Taeyong, sentado en el sofá.

Rin suspiró, y abrió por completo la puerta, dejando ver qué estaba vestida formalmente, incluyendo unos taconazos. El problema que detectaron de golpe era que sus piernas temblaban, y se mantenía sujeta para no caer de cara.

Rosalind Zhang era incapaz de andar con esos tacones.

— ¿Cómo es posible que no puedas andar en tacones?– preguntó Yuta divertido.– Eras una princesita en China, seguro que en alguna fiesta de ricos has tenido que llevar tacones.

— No han altos, simplemente zapatitos con poco tacón, elegantes y cómodos para pasar horas de pie – se excusó, con un tono mordaz.– Tengo que aprender a manejar estas mierdas.

— ¿Y eso en qué nos incluye?– señaló Mark, confundido.– No sé andar en tacones, Rosie.

— Pero yo sí – dijo Johnny, poniéndose en pie y yendo hacia ella.– Levanta la barbilla y ponte recta – ordenó de inmediato, dándola un toquecito en la barbilla. Ella acató la orden de inmediato.– No juntes las rodillas, Rosalind, y pon firmes esas piernas de modelo.

Haechan sacó el móvil con expresión de incredulidad, como todos ahí. ¿Estaban presenciando a Johnny enseñando a Rin cómo usar unos tacones? ¿De esa manera?

— Esto es surrealista – murmuró Jaehyun, aguantando la risa pero observando todo.

— Ahora suelta la puerta, y mira firme hacia delante, eres Rosalind Zhang, unos tacones no van a poder contigo – dijo, con las manos en las caderas y dejando todo su peso en una pierna.– Recuerda lo que he he dicho de la manera de colocar el pie al dar el paso, y recuerda lo de la espalda recta y las piernas firmes, porque sino, perderás el equilibrio por muy bien que tengas colocadas rodillas y tobillos.

— Vale – asintió tranquilamente.

Nadie sabe cómo, pero quince minutos más tarde tenían a Rin correteando de un lado para otro subida en esas armas mortales haciendo caso a todo lo que Johnny decía, dándola consejos sobre escaleras, acelerar el paso, agacharse y como hacer ver sus piernas más largas.

— Ahora quiero unos tacones – dijo Doyoung, haciendo que todos le miraran confundido.– ¿Qué? Hay que ser hábil hasta en tacones, ya has oído a Johnny.

— Johnny literalmente ha dicho – carraspeó Taeil.– Toda mujer debe usar su mejor arma, la seducción; ¿Cómo planeas usarla sin estas armas? Hay que ser hábil hasta en tacones, o descalza.

— ¿Lo recuerdas exactamente?– preguntó ahora Jungwoo.

— Bueno, lo ha repetido un par de veces.

Volvieron a mirar a Johnny y Rin, quienes ahora simulaban que a Rin la chocaban sin querer, enseñándola a mantener el equilibrio en ese tipo de situaciones. No entendían ese lado del americano, ni de Rin al estar tan atenta y casi que sumisa a las palabras del mayor, pero era la situación más rara hasta ahora en su convivencia con Rin, y eso que un día la encontraron poniendo mascarillas de aloe vera a los chicos de Dream mientras dormían.

Vi un vídeo de Johnny con tacones y diablos, anda mejor que yo en ellos xd