-Pasar por favor.-dice la madre de Jay y este me aprieta la mano.
-Que casa más bonita.-digo mientras arrastro a Jay al interior de la casa, es acogedora y desprende un calor familiar.
-Tengo que decir que estoy muy nerviosa.
-Y yo, es decir, nosotros.-dice Jay sin mirarla.
-Sentaros.-le hacemos caso y en el sofá grande color marrón nos sentamos Jay y yo, mientras la señora se sienta enfrente de nosotros.-No se por dónde empezar...
-¿Me quieres?.-miro a Jay que está inmóvil.
-¿Que? Claro que si Jay, eres lo mejor que este mundo me ha dado...-las lágrimas en su rostro aparecen.
-¿Por que me abandonaste?
-Yo... no tengo ninguna excusa, hice mal... Pero después de todo aquello me sentí sucia Jay, se me pasaron muchísimas cosas por la cabeza pero tú fuiste mi salvación. No sé si lo recuerdas, te visite muchas veces gracias a tu tía... pero no me dejaron volverte a ver...
-¿Quien?
-Tú papá...-Jay cierra los ojos y me limito acariciarle la mano.
-¿Por que?
-Veras... me quede embarazada.-Jay deja de apretarme la mano y la mira. Dios santísimo.-No podía culpar al bebé de lo que esos desgraciados me hicieron... Tú papá se entero y me prohibió verte... Me negué a ello pero sólo podía mirarte desde la distancia, cuando creciste no podía seguir haciéndolo porque me daba miedo a que me vieras.
-¿Tengo un hermano?
-Si...
-¿Donde está?
-Ha querido darnos un tiempo para hablar...
-¿El sabe todo?.-asiente su madre y Jay no aguanta más y se echa a llorar. Mi pequeño hombre por fin desprende todo ese rencor delante de su madre.-Lo siento joder... lo siento.-La madre de Jay se levanta y lo abraza, para nuestra sorpresa Jay se lanza a sus brazos.
-Tú nunca tuviste la culpa de nada mi pequeña albóndiguita...
-Joder mamá...-se separa Jay y está se ríe.
-Te he echado mucho de menos.
-Me voy a casar...-dice Jay mirándome y su madre abre la boca.
-Dios mío.-se echa a llorar y lo abraza.-Gracias por aparecer en su vida.-ahora me mira a mi y yo sonrío.
Tocan la puerta y ella se levanta.
-Soy hermano mayor joder.-dice Jay susurrándome pero con una sonrisa de oreja a oreja.
-Ya puedes comportarte para ser su ejemplo eh guapetón.-digo limpiándole las lágrimas y este me besa.
-Ho-Hola.-dice un chico parecido a Jay pero en versión más tierna.-Soy Jaden...
-Jay encantado.-le da la mano y este sonríe.
-Trisha encantada.-que mano ni que nada, tengo un cuñado y lo tengo que abrazar.
Mi móvil empieza a sonar, pido disculpas y me alejo para contestar.
-¿Llamó ya a emergencias?.-dice Henry preocupado.
-Véte comprando dos pasajes más de regreso.
Para recuperar el tiempo perdido la madre de Jay, Alessia, y Jaden se han quedado un par de semanas en casa.
No lo voy a negar estaba cagada del miedo de como Jay iba a llevar todo esto, pero nunca pensé que Jaden fuese la respuesta a esa sonrisa de todos estos días, nada más levantarse me pregunta que cosas pueden hacer y trata de no decir palabrotas por su madre.
-Tenemos que mirar una casa más grande.-dice Jay mirando nuestro departamento y yo hago un puchero.-Nena mira que estamos cuatro y vamos justos... Esta es una casa para solteros y yo quiero tener muchos hijos...
-Campeón vete calmando que la ovulación está totalmente controlada y fuera de serie para esas cosas.
-Bueno pero para visitas como la de mi madre y Jaden...
-Ese si es un buen argumento.-digo dándole un mordisco a la tostada.
-Tenemos cita con el agente inmobiliario dentro de dos horas.
-¡Jay!
-No lo tenía planeado...-me sonríe y yo suspiro.
-¿Y tú madre?
-Me han llamado diciendo que estará con Henry y Guiana.
-¿Jaden?
-Con Sketch y Ted.
-Tremendamente calculado eh...
Los chicos han acogido muy bien a Jaden, mi hermana no para de meterle mierda para que putee a Jay pero realmente ese chico quiere demasiado a mi chico. Es tan inocente, tan pequeño...
Después de ver cuatro casas, el agente llega a la conclusión de que Jay no quiere una casa familiar típica sino una casa a la italiana, para un equipo de fútbol y medio continente.
-¿Cuáles son sus imprescindibles?.-dice el señor mirándome.
-Un buen jardín, piscina, y la habitación principal en la segunda planta con terraza al jardín.-digo segura y el pobre señor sonríe pero realmente no sabe cómo mandarme a la mierda.
-Creo que estará será la definitiva.-dice aparcando y Jay mueve sus cejas.
-Comprometidos y viendo casas familiares, esto promete...
-Cigüeña desviada.
Mi alma se sube a la cima del cielo al ver solo la fachada.
-Dos plantas, jardín trasero con un pequeño cobertizo. Al ser una urbanización más privada no tenéis problemas con el parking.-Entramos en la casa.-Primera planta, tiene cocina con isla conectada con el salón, tiene dos oficinas, cuatro habitaciones de invitados, dos baños, el salón conecta con el jardín.-Nos mira y yo me limito asentir.-Segunda planta, cinco habitaciones principales cada una con su baño, pequeña sala de estar, esta es la habitación con terraza.-abre la puerta y es tal como la quería.-Desde la segunda planta también podéis acceder al jardín.-Nos lleva a unas escaleras y la boca se abre. Tremendo jardín.- Perfecto para barbacoas tenéis esa zona allí exclusivamente, luego aquí perfectamente podrían montar una fiesta familiar, y allá para tomar el sol. Todo esto incluye sus imprescindibles señor Hutton, luz natural con la ayuda de los ventanales, naturaleza a su alrededor y perfecto para que sus diez hijos jueguen al fútbol. ¿Que opinan?
-Nos la quedamos.-digo sin dejar que Jay diga algo y este sonríe y choca los cinco con el señor.-¿Planeado?
-Tremendamente calculado nena.
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Contigo, una y otra vez
JugendliteraturDos personas bastante distintas se encontraran en un momento en donde ambos se necesitan.