59

942 54 9
                                        

Ahora más que nunca creo que jamas vamos a recibir un regalo serio de los cuatros incontrolables.

Esto en vez de ser un amigo secreto es una sex shop traído a casa.

      -Se nos ha olvidado darte tu regalo tía Trish.-dicen los tres y me cogen de la mano.-Espera, que también te tienes que tapar los ojos.-Sam me tapa los ojos mientras alguien me ayuda a caminar a no sé dónde.

Me quita Sam sus manos y hay un gran proyector delante mío.

Ya verás que van a poner todas mis fotitos con cara de depravada y la baba colgando.

El jardín está decorado con luces, que se apagan en el momento en que la canción de Aerosmith I don't want to miss a thing empieza a sonar, todo esta oscuro.

De repente una foto mía que nunca había visto antes aparece, reconozco ese outfit fue la primera vez que toqué el estudio de los chicos.

No te creo.

Luego aparece una foto de cuando me quede dormida en el viaje del lago, luego comiendo tacos...

Pero que carajos es esto.

Mis lagrimas empiezan a salir pero cada foto hace que sonría.

Madre mía... unos vídeos míos subida a la barra mientras bailo, estaba pedo... la primera foto que me tomé con Jay hace que me manda la mano al corazón.

Joder vaya que si ha pasado tiempo.

Vídeos de cuando me explotaba en el gym, del viaje a Italia; fotos con Guiana, Henry, Liam, etc.

Los chicos saben donde esta mi punto débil.

Al acabar la canción, el proyector se apaga y se encienden las luces.

  -Es lo más bon...-No terminó la frase porque Jay está enfrente mío.-¿Lo has hecho tu?.-asiente y más lágrimas caen por mis mejillas.

-La primera foto que te tome fue la primera vez que te vi, ¿sabes por que?.-empieza hablar Jay y esto cada vez lo entiendo menos.-Porque desde que te vi supe que me ibas a cambiar la vida, y vaya que lo hiciste.-me rio y este me coge de las manos.-Has hecho que mi vida sin sentido lo coja, has hecho que cada día quiera superarme más para estar a tu nivel, joder siempre quiero ser el primero en despertarme para verte dormida...

  -Jay vas a hacer que me dé un turuleke.-digo quitándome las lágrimas y todos se ríen.

-No solo me has cambiado a mi, sino a todos ellos, a mi familia, nuestra familia. Has traído alegría a nuestras vidas sin quererlo, por eso te amo. Eres tan fuerte que no necesitas de nadie para seguir adelante, quiero estar el resto de mi vida junto a ti para verte lograr todas tus metas y sentirme orgulloso.

-Jay sabes que este es el mejor regalo.-digo entre sollozos y este asiente.

-Tu eres el mejor regalo que todos nosotros podemos tener pero sobre todo yo, sé que no me creerás porque no suelo decírtelo pero con solo verte feliz haces que todo valga la pena. Has hecho que quiera volver a ver a mi madre joder.-dice ahora con lágrimas y hace que me rompa más.-Has hecho de mi un buen chico.

-No seas tonto que ya lo eras.-digo dándole en el hombro y se ríe.

-Mírate.-dice alejándose de mi pero sin soltarme de la mano.-Eres perfecta, hasta cuando quieres matar alguno de ellos, amo cuando te enfadas, amo cuando me regañas por haber dejado la ropa tirada. Pero, ¿sabes que amaría más?.-niego y este se pone de rodillas.

Ah no mames.

Mi corazón empieza a latir más rápido de lo normal.

En cualquier momento me voy a desmayar.

  -Lo que más amaría en este mundo es tenerte para siempre, que seas la madre de mis hijos y que pases toda la vida a mi lado. ¿Quieres casarte conmigo?.-saca la cajita del anillo y solo escucho los llantos de los demás.

-Madre mía...-digo como puedo y este se ríe.- ¿Es una broma?.-este niega con su cabeza.-JODER CLARO QUE SI.

Todos empiezan a gritar mientras Jay me pone el anillo y me besa.

   -Sostenme que me voy a caer.-digo después de unos segundos y este se ríe.

   -Nunca te dejare caer.-le vuelvo a besar como loca.

Dios esto es un sueño.

Todos se acercan a felicitarnos y yo solo puedo decir gracias, joder.

   -NOS VAMOS DE BODA.-grita Sketch.

-No me lo puedo creer.-digo cuando Holly me abraza y está se ríe.-¿Lo sabias?

-Todos.

-QUE ME CASO JODER.-digo saltando y Jay solo se ríe.

Volvemos a dentro ya que hace un frío que pela y yo no puedo decir nada.

No hay palabras para describir lo que siento, quien me iba a decir que estaría comprometida...

Hace unos meses todo era gris, todo una rutina y ahora tengo todo lo que nunca jamas pensé que tendría.

Miro mi anillo y no puede ser más perfecto.

Recuerdo que hace cuatro semanas estaba hablando con Holly...

Maldita cómplice.

Justo a ella le dije que me había gustado un anillo de Tiffany.

  -Te amo Jay.-digo sonriendo y este me besa.

  -Ahora este es de tu amigo secreto.-dice Jay y yo niego.

-Jay por favor, no quiero mas.

-Cógelo.-dice sonriendo y yo ya quiero echarme a llorar.

Un precioso collar con una luna de esmeralda.

-Al igual que tu padre a tu madre, yo te daría la luna y las estrellas.

-Joder...-digo llorando y todos se ríen.-Gracias.-le beso y ya me arrepiento de mi regalo.

Nada podrá superar este momento.

-Para Jay de tu amigo secreto.-digo todavía llorando y le paso una cajita pequeña.-Vale, solo quiero decirte que esto no se compara con nada de lo que me has hecho hoy.

La abre y creo que no he escuchado más me cagó en la puta en un segundo.

     -No te creo.-dice mirándome y yo agacho la cabeza.

  -Te lo dije pero espero que al menos haya acertado en el color.-le cojo de la mano y lo llevo afuera.

-Dios santo.-dicen todos.

-UN PUTO MASERATI.-dice Henry.

Contigo, una y otra vezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora