Hoy vino mi mamá a verme. Viene bastante seguido.
Mi madre es pequeña, su padre era de baja estatura, y ella y sus hermanas lo son. Tiene unos enormes ojos color del tiempo. Si no los tuviera ella, yo dudaría de esa clase de ojos. Pero los tiene, con lo cual debo aceptar su irrefutable existencia.
Durante el invierno, son un marrón claro, y en el verano son de un verde contundente.
En la primera y el otoño, no tienen rótulos, tienen centelleos de varias tonalidades.
Es delgada pero está convencida de que es delgadísima.
Ella, junto con mi perro, son mis pilares en este momento. Se levanta casi a la hora en que yo me acuesto, con lo cual a mi modo de ver, llegó casi a la madrugada. Permaneció un rato en el living, la oí discutir con Valentina.
Luego me contó que le preguntó cómo estaba yo, y Valentina le dijo que a ella yo no le importaba Y mi madre se indignó. Lo peor no es lo que dice, lo peor es lo que hace o, mejor dicho, lo que no hace.
No importa, ya pasará, le dije cuando me contó el motivo de la discusión.
Valentina sufre mucho, dijo mi madre. Sí, es cierto, sufre pero no puedo hacer mucho al respecto. No puedo ponerle la máscara de oxígeno, porque aún no encuentro la mía.
Mi mamá continuó: "Imaginate que el padre la dejó todo el tiempo sola y padeció y lloró tanto que, sin poder contener el enojo, rompió toda la habitación del country. Mientras él se iba y ella lo tomaba de los pantalones. Entonces él bajo de todos modos la escalera con ella a rastras y luego le tironeó las manos hasta soltarla. Logró salir, subió al auto y desapareció a toda velocidad.
Nos llamó a tu papá y a mí, para que fuéramos a quedarnos con ella, nos dijo que llegáramos urgente. Ni siquiera pudimos almorzar.
Ella no quería estar en el country con nosotros, quería a su papá. Cuando se calmó y dejó de patear todo, cerramos la casa y la llevamos a la nuestra. Se durmió llorando y después de unas horas se levantó con hambre y pidió milanesas. Comió callada y se quedo así, sentada en un sillón. Luego, volvió a dormirse. El padre nunca apareció."
¿Qué estaba diciendo, te preguntarás, querido diario?
Yo me preguntaba lo mismo. Él se comprometió a pasar el fin de semana a disposición de las chicas, le tocaba a él hacerse cargo de ellas, no a mis padres. Hacía cuatro fines de semana que tanto los sábados como domingos eran una fiesta para él. Qué lo hace irse corriendo sin poder llevarla y arrastrarla por toda la casa pidiéndole amor. No sé por qué me extraña esa conducta. No ama a nadie. Sólo ama en función de su necesidad. Algún día se sentirá miserable sin ellas y volverá a buscarlas. Hoy no las necesita, y cómo se sientan ellas no es su problema. Como nada en la vida. Su único problema es él mismo. Debí adivinar la naturaleza de su ser cuando me decía "vos sos linda, inteligente y simpática, sin embargo no lo ves, pero yo odio trabajar, sólo me gusta el dinero, soy gordo y pelado, y me creo el mejor trabajador, con porra y con abdominales...". Él y su mundo en el que no cabe mi hija arrastrándose con súplicas de amor. Mi desdichada hija.
Tuve el impulso de salir a preguntarle a Valentina qué había sucedido. No quise, no era momento en el que pudiera ver lo que es su padre, tampoco es mi misión. Sólo restaría puntos. Me tengo que volver un poco más estratega.
Le serví un café a mi madre. Ella ama el café. El aroma de café es aroma a mi madre. No puedo tomarlo, me cae mal por estos días, pero verla ponerle montañas de azúcar, revolverlo sin prisa y darle sorbos suaves como si fuera la primera vez, me hace bien.
![](https://img.wattpad.com/cover/221615878-288-k386753.jpg)
ESTÁS LEYENDO
LA DESVENTURA DE AMAR
General FictionTamara relata en su diario intimo la historia de su vida, en un viaje a su yo interior, a medida que avanza una historia que tomará cursos inesperados, frente a lo cual se despertará el temor a su muerte, el nuevo descubrir de sus fortalezas, y l...