Llegó el viernes y acá estoy en mi moto afuera de la universidad esperando a la pecosa.
Hoy tenía el parcial y por eso no la moleste estos días que pasaron ya que tenía pensado venir hoy así que acá estoy.
La veo de lejos a través de la puerta de vidrio, viene caminando con ese pibe que siempre está con ella, suspiro tratando de controlar mi humor para que no se vaya al carajo al ver como él la abraza por los hombros.
Abre la puerta y la deja salir primera, después sale él, ella no me ve todavía, se quedan hablando un poco y veo que él le hace una seña rara con la cabeza hacia donde estoy yo y ahí la pecosa conecta sus ojos en mí.
Sonrió inconscientemente, ella lo saluda y se acerca a mí con una hermosa sonrisa, me encanta que siempre esté así de buen humor aunque conmigo le dura muy poco, soy un molestó, pero me encanta joderla no lo puedo evitar.
—buenas noches—me da un beso en la mejilla.
—pecosa—contesto—y como te fue?—pregunto, ella sonríe aún más y eso me gusta.
—hice todo, así que esperemos que bien—levanta las manos—y vos cómo estás?
—piola, seguro que está todo bien te tengo fe—le sonrió dándole uno de los cascos—yo bien, con ganas de unas birras así que vamos—me subo a la moto.
—y si no quiero—dice parada al lado de la moto
—me vas a obligar a que te suba?—la miro serio
—no podés hacer eso, si no quiero ir no voy y listo—dice desafiante
—si querés ir, solo te estás haciendo la difícil por qué en el fondo te gusta este juego de que te esté insistiendo—me rió y veo que se quiere reír pero no lo hace—pero si realmente no querés ir, déjame llevarte a tu casa y me voy—levanto los hombros y me mira en silencio por unos segundos, se que quiere venir.
—solo un rato por qué estoy cansada—contesta y se sube, sonrió satisfecho y una vez que se acomoda enciendo la moto.
Siento que apoya sus manos en mis hombros, por alguna razón quiero que me abrace como hace siempre así que aceleró y logro lo que quiero.
Se que Rebeca no va a estar en el bar así que decidí llevarla de nuevo ahí.
Acomodó los cascos en la moto una vez que nos bajamos y por inercia y ganas la agarró de la mano y caminamos hasta adentro, la suelto para sentarnos uno al lado del otro.
—la misma que el otro día?—pregunto leyendo la carta de cervezas.
—si—dice revisando su celular.
—quien es el pibe ese que tiene la manía de abrazarte?—pregunto mirándola serio
—no te importa a vos quién es—contesta sería
—si me importa, por qué te abraza tanto?—vuelvo a preguntar y sonríe negando
—te dije que no hagas más estos planteos—se acomoda en su lugar, se que ya está nerviosa.
Me acercó más a ella—y yo te dije que no quería que te abracen adelante mío—corre la mirada a sus manos, me gusta mucho lo que provocó en ella.
—no tenés ningún derecho a pedirme eso—habla bastante rápido a causa de sus nervios.
—no necesito tener ningún derecho—me acercó más y aspiró sintiendo ese perfume que la destaca tanto, ella se corre—me tenés miedo Luz?—pregunto acercándome más a ella hasta que queda contra la pared.
ESTÁS LEYENDO
Impredecible // Trueno
Teen FictionAlguna vez escucharon la frase "La vida es impredecible", mi vida es un claro ejemplo. Después que me mudé a la capital de Buenos Aires mi vida se basa en momentos tan impredecibles y todos ocasionados por una sola persona, no, no por mí, si no por...