Impredecible // Trueno

°55°

Entramos al living y Becky me hace seña que subamos así que Lara está en su habitación, subimos, abre la puerta, entro atrás de ella y la veo sentada como indio en la cama mientras llora, me sentí el peor en ese momento.

—Lari—dice Becky y ella se saca las manos de la cara y me mira sorprendida.

—perdón no sabía que venías, ya me voy—contesta Lara parándose mientras se limpiaba las lágrimas.

—no no ey no te vayas, quiero hablar con vos—le digo acercándome un poco.

—querés hablar?—le pregunta Becky apoyando su mano en la espalda de ella.

Ella no contesta nada solo se escucha sus sollozos, suspiro negando.

—para que? Ya me quedó claro todo y te prometo no joder más, pero no hace falta que me pidas que me aleje una vez más, ya lo entendí—dice ella dándose vuelta mirándome a los ojos.

—no es eso, podemos hablar bien por favor?—le preguntó, ella asiente.

—bueno yo voy abajo—dice Becky y cuando pasa por al lado mío me acaricia el brazo.

Veo que se sienta en la cama, dejo el casco en el escritorio y me siento a su lado.

—te quería pedir perdón por cómo te hablé ayer—arranco a hablar—estuve mal y dije cosas que no pienso ni siento—la miro pero ella se mira las manos mientras las lágrimas caen por sus mejillas—no quise lastimarte, estoy pasando un momento muy difícil y exploté, eso no justifica que te haya tratado así, pero quiero que sepas que me arrepiento de haberte dicho todo eso y que la mayoría son cosas que no pienso—me quedó en silencio.

—esta bien igual te entiendo, uno cosecha lo que siembra y yo sembré dolor, rencor y odio en vos, es obvio que vas a reaccionar así ante mi presencia después de tanto tiempo, me duele que sea así pero lo acepto—contesta sin mirarme.

—no Lara, yo no te odio ni siento rencor y dolor tampoco, ya no siento dolor por vos—niego y llevo la mirada al piso—vos fuiste alguien muy importante en mi vida, te ame muchísimo y lo sabes por qué te lo demostraba todo el tiempo, te tome en serio y fuiste mi primera novia, mi primer amor y eso no lo voy a olvidar aunque muchas veces quise hacerlo, no se puede—hago una pausa suspirando—pero también la pase muy mal y eso tampoco se puede olvidar, se supera nada más, el tiempo te ayuda a acomodar todo en su lugar y pasó un año y medio, en ese tiempo yo hice mi vida, era pendejo no me podía frenar ahí, aunque muchas veces lo pensé—confieso de la manera más sincera.

La escucho que cada vez llora peor y se que le duele, por qué yo también lo sentí en su momento y es un dolor que no se puede explicar, pero también sé que es necesario ese dolor y se supera, se sale.

—se que me amaste eso lo tengo en claro, se que también te ame como a nadie y estoy segura que nunca más voy a amar a alguien así, pero también tengo en claro que te lastimé muchísimo y no hay vuelta atrás, tarde mucho tiempo en volver y te perdí para siempre—levanta la mirada y me mira fijo—pero también sé que duele más el alma cuando lo pedís que cuando lo aceptas—veo como el mentón le tiembla y me parte el alma verla así—no sabes cuánto dolió pedirte que te alejes cuando no era lo que quería, pelear contra lo que sentís es un dolor horrible que no se lo deseo a nadie—corre la mirada soltando el llanto.

—si vas a volver a amar, nunca amas de la misma forma, pero te aseguro que te vas a volver a enamorar, y que va a estar todo bien—le sonrió—se que te dolió, hoy en día puedo entender que te dolió y lo acepto sin rencor ni juzgo tus motivos, pero hay que verle el lado positivo, tuviste una hija hermosa Lari, ella te va a saber guiar y seguramente todos los días saca lo mejor de vos, lo demás viene solo—la veo sonreír.