Un mes después del incidente se realizó el juicio contra los mortífagos, el sanador O'Neill, Lucy y Victoire. Fue un golpe bastante duro para todos.
Tuve que explicar todo lo sucedido en el castillo de Gnosall, incluidas las torturas a las que estuve sometida, momento en que muchos de los míos lloraron con las mandíbulas apretadas.
Cuando la sentencia fue dada y el juicio terminó, Fleur y Percy se acercaron a nosotros con los dedos entrelazados.
- Sentimos mucho lo que ha ocurrido, nunca pensamos que terminaría de esta manera.
- Espego que podamos olvidag estos últimos años y que volvamos a seg una familia unida.
Todos los miramos con pesar, sin contestar a sus argumentos, dejándolos hablar.
No quería escuchar nada más después de un largo monologo por parte de ellos, no les iba a perdonar, no quería saber nada y solamente me fui. Al llegar a casa por la red flu vi que no fui la única con este pensamiento; muchos estaban conmigo.
Regresé a Hogwarts esa misma noche a petición mía. Desde ese momento, Hugo, Alice y yo nos centramos en los estudios y el quidditch; hasta venían a las clases particulares y a las conexiones junto a Ted. Nos hicimos inseparables.
Al principio lo hacíamos por Lorcan, no queríamos estar solos o dejar de pensar en él. Al final comprendimos que la vida nos puede separar en un abrir y cerrar de ojos, así que aprovechamos el tiempo de la manera más bonita que encontrábamos.
- Es placentero veros conectar - Hugo estaba estirado en el sofá, con las manos detrás de la nuca, recibiendo las caricias en el pelo de Alice.
Mi mejor amiga tuvo razón, Hugo no se había enfadado conmigo, ni un poco, solo me pidió que no me separara de él durante esa caída. No lo hice.
- Quiero emborracharme - murmuró Hugo un viernes al salir de clase.
- Hoy hay fiesta - Alice lo miró divertida.
- Pues a beber como cosacos - me miró unos segundos. - Lily, tú también, Alice cuidará de nosotros.
- Siempre - asintió con una gran sonrisa.
Esa noche bebimos, mucho, y tuvimos suerte de que, al despertar, Alice nos esperaba con poción contra la resaca para ambos. Se lo agradecí.
Los EXTASIS fueron realmente bien, mejor de lo que me hubiera imaginado y, dejando atrás los nervios de esos dichosos exámenes, pudimos disfrutar de nuestra graduación con emoción.
Me tocó a mí, por petición de muchos de los alumnos de séptimo, realizar el discurso de agradecimiento y despedida.
Había planeado, la misma mañana del gran día, hacer un discurso bastante parecido al de los años anteriores con la ayuda de algunos compañeros.
Cambié de opinión cuando subí a la tarima, notando como todos los ojos me miraban directamente a mí.
Hablé en un discurso improvisado sobre la importancia de hacer todas esas cosas que nos dictaba el corazón. De pensar en las consecuencias, pero no dejar de hacer eso que realmente queríamos hacer.
Insistí en ser felices, en aprender a serlo de la manera correcta, en disfrutar de cada día, igualmente que fuera el más triste de nuestra vida.
Expliqué que fue Lorcan quién me enseñó tal cosa.
Le di las gracias a él, por dejarme ser su amiga, y a los profesores, criaturas, padres, hermanos y familia que nos había dado la oportunidad de vivir esos maravillosos años.
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Empremta
FanfictionObligados a llevar una vida paralela, Lily y Teddy se enfrentarán a distintas situaciones acompañados por su familia y amigos. La maldición Empremta recae sobre ellos y deben aprender a convivir todos juntos. La historia de la tercera generación qu...