Bienvenidos al Mundo del ISO (International Security Organization)
Una joven mujer se adentra al Mundo del ISO pasando por diferentes situaciones tras conocer a dos hombres.
Hombres cuya inteligencia y preparación sobrepasaba a cualquier ser humano...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Nos quedamos en la entrada y pudimos apreciar el enorme salón con mas o menos dos mil personas, las luces blancas se prendían y apagaban con Mad Love de David Guetta sonando de fondo a todo dar, se sentía el retumbe por todo mi cuerpo acelerando a mi corazón emocionado.
De pronto unas luces nos opacaron y las miradas se dirigieron a nosotras.
Sonreí cuando sentí la mirada de William sobre mí, palmeó el brazo de Hans sin dejar de mirarme y luego Hans se centró en mi dejando su vaso sobre la barra para enderezar su cuerpo con expresión neutra y a la vez sorpresiva.
Con el ritmo de la música las tres avanzamos cual pasarela en medio del gentío, segura levanté la cabeza percatándome de todas las miradas puestas en mí.
Había grupos como era de esperarse. De lado derecho de la estancia había una barra donde estaban todos los supervisores y superiores de segundo nivel con un barman de servicio. Del lado izquierdo, uno similar pero esta no contaba con bebidas alcohólicas, distinguí lo que sería ponche y un Bufet de diferentes tipos de aperitivos para los sujetos inferiores.
A lado de la barra de los superiores un guardia respaldada un salón aparte lo que supuse era la zona vip.
— Dios mío — Christopher pasó su mano por su rostro detallándonos a las tres — Dichoso mis ojos que aprecian verdaderas bellezas afrodisíacas.
Tomó mi mano y dejó un beso en ella sonriéndome.
— Debemos agradecer a Harper y Grace por dejarte tan bella — le sonreí tímida.
Miró a Harper y ella se mordió el labio provocándolo, eso fue como un adelante para él y la tomó de la cintura uniendo sus labios en un beso inesperado para todos.
Solté una risa feliz por ambos. No sabía en que momento exactamente habían resuelto su problema por completo, pero ahora eso era lo que menos importaba.
Grace se acercó a Andrew y dejó un beso en su mejilla en forma de saludo y luego fue tras William y Hans. Hice lo mismo que ella.
— Nunca me imaginé verte tan sensual — Andrew besó mi mejilla — estás hermosa.
— Gracias — le sonreí y fui a William para saludarlo. Todo en mi interior se removió cuando su mano viajó a mi cintura y dejó un beso en mi mejilla.
Ni un segundo y ya me sentía embelesada por su toque, cercanía, mirada, perfume, belleza... por todo. Me separé de él y lo miré directo a los ojos.
Lo extrañaba... mucho.
— No podría describir cuán hermosa estás — asentí bajando la mirada.
Me giré a Hans topando nuestras miradas y me acerqué dejando un beso en su mejilla dejando que su mano viajara a mi cintura.
Otro que me llevaba a la luna con tan solo un toque inocente. Ambos estaban tan condenadamente guapos, que era difícil de creer si eran reales. Mi corazón enamorado se derritió cual caricatura al verlos.