ᴄʜᴀʀᴍᴏʟʏᴘɪ; ᴋ.ʜ

20

Desde aquella noche, tanto Kakashi como Hiro, se mantuvieron distantes de Nyoko.

Entendía el caso de Hiro, acababa de volver a la libertad e inmediatamente se había enterado que su mejor amiga estaba muerta y que su enamorada no había hecho nada al respecto por salvarla siendo la única que podía hacerlo.

Nyoko no la había ayudado y ella, de todos modos, con los pocos minutos de vida y la escasa fuerza que le quedaban, la había salvado de morir de allí.

Reiko había salvado a una persona que ni siquiera se había molestado en salvarla a ella, tampoco se había encargado de detener su secuestro y poco y nada había hecho para que Ryouma no fuera decapitado.

Hiro encontró una culpable en poco tiempo en la cual podía depositar sus frustraciones, dolor y por sobre todo odio.

Y la Tsukino no lo culpaba, en realidad creía que tenía razón en descargarse en ella y verla como culpable, pues ella también lo sentía así. Quizás fue por ello que no se encargó de ir a buscarlo para explicarle lo sucedido.

En cuanto a Kakashi, no sabía que podía haber hecho para causar eso, pero imaginaba que tenía que ver con algo respecto a lo sucedido en la misión.

Podía ser por las técnicas que había utilizado ya que no eran muy ortodoxas. También podía ser por las consecuencias que le produjo utilizar el último jutsu con tantas personas, la había tenido que cargar como un peso muerto en su espalda una gran parte del trayecto. Pero también estaba la posibilidad de que hubiera sido por el abuso de confianza de su parte cuando se quedó dormida sobre su pecho aquella noche.

Entendía que podía haber resultado ser una falta de respeto pero no había tenido la intención de que lo fuera, si aquello le había molestado podría haberla alejado sin más pero aquello tampoco sucedió.

Decidió que a ambos les daría su tiempo para poder razonar lo que les sucedía sin involucrarse, pero si lo que sucedía interfería en alguna de las misiones que estuvieran juntos tomaría cartas en el asunto sin siquiera pensarlo mucho.

No todos había sido crecido una raíz como para entender su manera de actuar pero siempre pondría el bien de la aldea en primer lugar.

La parte de ella que había permanecido por más de que estuviera en raíz, la dulce y comprensiva, seguía ahí y solo por esa mitad dejaría que Hiro pudiera hacer su duelo y que Kakashi aclarara sus pensamientos.

Esa era la poca humanidad que le había quedado luego de dejar raíz.

La dulce y comprensiva Nyoko que se preocupaba por todos y permitía a sus enemigos redimirse había abandonado parte de su cuerpo, lo que quedaba de ella solo podía hacerse presente con sus seres queridos, como era el caso.

Caminaba por la aldea, las últimas dos veces que había estado por allí no había podido recorrerla en su totalidad.

Ya no tenía más ganas de estar encerrada en su antiguo hogar, ese lugar tan desolado que ya no irradiaba cariño y calidez, ya no era lo mismo que cuando su abuela estaba allí haciendo una que otra cosa como, por ejemplo, hacer manualidades o cocinar y a cuando estaba su hermano, que la hacía reír y compartían dulces.

Porque las cosas habían cambiado y tenía que soltar el pasado.

Ella ya no tenía seis, habían pasado más de nueve años, y su abuela ya no se encontraba con vida sino que estaba en una tumba, y su hermano ya no estaba cuidándola, haciéndola vivir una vida feliz y ni siquiera estaba segura de que siguiera vivo.

Suspiró y metió sus manos en sus bolsillos. Debía olvidarlos, si no tenía un pasado ya no había algo que pudiera afectarle de tal modo. Intentó volver a su modo de Raíz.