₀₀₅ ɴᴏᴛ ʏᴇᴛ

21.8K 2.4K 2K
                                    

Cameron se encontraba, nuevamente, practicando su puntería, pues quería que ésta fuera perfecta

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Cameron se encontraba, nuevamente, practicando su puntería, pues quería que ésta fuera perfecta.

Sabía que era su modo de lidiar con la desaparición de su hermano, pues, en su mente, cuando Merle regresara se sorprendería por su gran progreso.

—¿Cameron?

La niña volteó a escuchar una voz cerca, la de Carl Grimes.

La rubia lo miró confundida, el hijo del sheriff nunca hablaba con ella.

Y luego lo notó: Lori no estaba con él.

—¿Qué quieres, bastardo?, ¿te perdiste?

Carl solo negó lentamente, mirándola.

—Quiero que me enseñes a disparar. –pidió el niño, pero Cameron solo soltó una pequeña risa.

—Una mierda, lárgate antes de que tu padre me espose a un árbol.

—No les diré nada.

—Que rebelde. –murmuró con burla.

—Quiero defender el campamento.

Cameron volteó a ver al niño de frente.

Era de su misma estatura, y probablemente de su misma edad o un año mayor. Pero se veía y se sentía tan infante.

Cameron no sabía por qué ella no se sentía como un infante, no entendía que había salido mal con ella.

En el fondo sí entendía.

—Mira, si quieres defender el campamento solo no te alejes de los demás, si te encuentra aquí un cadáver y te muerde; Te conviertes, e irás a matar a todos los demás. –susurró, cerca del otro niño, quien sólo la miraba con temor.

Ambos voltearon a ver hacia el campamento, donde se escuchaba un grito de Jacqui.

—¡Mordieron a Jim!

Ambos caminaron se regresó con los demás.

Carl fue con su madre, mientras Cameron iba con su hermano, quien estaba en el pequeño círculo de adultos que conversaban.

El pequeño Grimes no sabía qué era, pues él sabía que no era normal para alguien de su edad que se comportara y hablara, o pensara, como Cameron, pero ella estaba ahí. Era parte de ese círculo de adultos que tomaba decisiones importantes, daba su opinión respecto a todo, y ayudaba a defender el campamento.

El quería sentirse grande y fuerte, como ella era.

—Yo diría que le diéramos en la cabeza con un pico. –Habló Cameron.

—Y a la chica muerta también. –apoyó Daryl.

—¿Les gustaría eso si fueran ustedes? –los miro Shane.

—Te lo agradecería mientras lo hicieras. –aseguró el mayor.

—Odio decirlo, nunca pensé que lo diría. –se escuchó la voz de Dale. —Pero los Dixon tienen razón.

—Jim no es un monstruo, Dale. –Habló Rick. —Ni un perro rabioso.

—Aún no. –comentó la niña.

—Está enfermo. Es solo un hombre enfermo. Si tomamos ese camino ¿Dónde estará el límite? –Hablaba el líder.

—Ya sabemos dónde está el límite, no hay tolerancia para caminantes o quienes vayan a serlo. –explicó Daryl.

Cameron puso los ojos en blanco al momento en que todos empezaban a hablar.

—Iré a dormir a un auto, me avisan si alguien muere. –pidió la niña, caminando hacia el hermoso auto rojo que Glenn había traído de la ciudad.

—Eso es mío. –se escuchó la voz de él asiático.

—¡Era!

—¡Era!

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Semi-Automatic ❪Carl Grimes❫Donde viven las historias. Descúbrelo ahora