¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—Se propagó. Todos los que sobrevivieron el ataque del pabellón D, junto a Sasha, Caleb y otros, ahora están contagiados.
La voz de Hershel sonaba algo lejana para Cameron.
Ella odiaba levantarse tan temprano.
Pero sabía que era importante.
—¿Y qué hacemos? –preguntó Carol.
—Primero hay que llevar a los enfermos al pabellón A, lo usaremos para aislamiento. –explicó el mayor.
—Pero ¿qué haremos para detenerlo? –volvió a hablar la mujer.
—No podemos detenerlo. Si te enfermas tienes que superarlo.
—¿Pero solo te mata? –se escuchó la voz de Michonne, por primera vez en toda la conversación. La mujer estaba un poco alejada de ellos.
—La enfermedad no te mata, los síntomas sí. Necesitamos antibióticos. –avisó el mayor.
—Ya hemos ido a cada farmacia cercana y más. –Habló Merle.
—La facultad veterinaria de West Peachtree Tech. Tal vez se haya salvado de los saqueos. –explicó Hershel. —Necesitamos los mismos medicamentos para animales que tienen ahí.
—Está a ochenta kilómetros. Antes era muy peligroso. –Habló Daryl. —Pero ahora no. Me llevaré a un grupo. No hay tiempo que perder. –se levantó de su asiento.
—Yo voy. –Habló Michonne.
—Ellos han estado expuestos, tú no. Si vas en auto con ellos...
—Igual ya me contagiaron las pulgas. –se encogió de hombros la mujer, haciendo reír a la niña.
—Yo puedo guiarlos, sé dónde guardan todo. –Habló el mayor.
Daryl lo miró unos segundos, incómodo, para luego ver a su hermano.
—Siempre que salimos pasa lo mismo. Tarde o temprano hay que correr. –explicó Merle.
—Entonces les haré un mapa. –susurró, con una pequeña sonrisa, para no hacer sentir mal a Cameron.
—Iré por mis cosas. –Habló la niña, levantándose de su asiento, pero sus hermanos la detuvieron.
Daryl la miró, como había mirado a Hershel hace unos segundos.
—Cam...
—Ni mierda, yo voy. –se quejó de inmediato.
—Es temprano. Ve a dormir un rato más, ayer pasaste toda la tarde llenando tumbas. –Habló Merle. —Luego ayudas a Hershel con los enfermos.
—No quiero quedarme aquí si ustedes no van a estar.
—Siempre te quedas aquí mientras nosotros no estamos.
