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-Ese estúpido caballo tuyo me tiró. -se quejaba Daryl, mientras Hershel cosía la herida en su torso. Ya le habían cosido y vendado la pequeña herida de la bala que le había rosado la cabeza.
-Se llama Nerviosa Nelly, si me hubieran preguntado les hubiera avisado. La que Cameron se llevó solo seguía a Nelly, pero logró llegar a la granja más rápido.
-¿Ya le avisaron a Cam que estoy aquí?, no me ha venido a ver. -Habló nuevamente Daryl, con confusión.
De inmediato el rostro de Rick se tornó serio. El arquero notó cómo miraba la habitación, como si buscara con qué cambiar el tema, pero finalmente tuvo que hablar.
-Cameron llegó desmayada con una herida en la cabeza, se debió golpear con algo cuando el caballo salió corriendo. Ya la cosí, así que estará bien, pero aún no despierta. -explicó Hershel, con una voz tranquilizadora, que no tenía efecto en el arquero.
-¿Dónde está? -susurró el hombre, sin mirar a nadie más.
-Junto al cuarto donde está Carl. -Habló Rick.
Daryl se levantó, con algo de dificultad, de inmediato salió de cuarto, para buscar a su hermanita.
Al entrar a la habitación donde la niña estaba, la vio. Tenía una venda alrededor de la cabeza, y estaba dormida en la cama.
El mayor fue hacia ella, abrazándola, casi como si de un peluche se tratara.
-No te preocupes, Cam. Ya estoy aquí. -susurraba el arquero.
Daryl pasó el resto de la noche ahí, junto a su hermana. Incluso se durmió un rato, pero al despertar no se movió, quería estar a su lado para que ella supiera que todo estaba bien.
El resto del grupo, y los Greene, estaban cenando, Daryl escuchaba pequeñas conversaciones de vez en cuando, sin entender bien lo que decía, solo se mantenía ahí.
Mientras el arquero veía a Cameron y acariciaba lentamente su rubio cabello, que ya estaba un poco más abajo de los hombros y se estaba poniendo más claro, algunas lágrimas empezaron a caer por su rostro.
Tal vez el haber "visto" a su hermano le había afectado, o el ver a su hermanita tan indefensa y lastimada, como ya la había visto tantas veces antes, tal vez el sentirse tan solo sin ellos.
Hasta que sintió a alguien entrar a la habitación.
El hombre rápidamente limpió su rostro, para voltear a ver.
Carol estaba entrando al cuarto, con una bandeja en manos, la cual colocó en la mesita de noche.
-¿Cómo estás? -Habló en un susurró.
-Genial. Mírame. -respondió el hombre con ironía.
-Les traje algo de comer, supuse que Cameron tendría hambre al despertar y que tú no saldrías de aquí. -explicó la mujer.
Él no respondió.
Carol lo miró unos segundos, antes de acercarse a él, dejando un pequeño beso en la cabeza, para luego darle uno a Cameron.
-Cuidado, nos cosieron hoy. -murmuró Daryl, sin mirar a la mujer.
Ella se mantuvo en silencio un poco, hasta que decidió hablar.
-Deben saber algo... Ustedes dos hicieron más por mi niñita hoy que su padre durante toda su vida.
-No fue nada que Rick o Shane no hubieran hecho. -Habló el hombre, causándole una sonrisa a Carol.
-Lo sé. Ustedes son tan buenos como ellos.
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