hateful love. ᵗᵉʳᵐⁱⁿᵃᵈᵃ

12

Hoy es viernes y me siento aliviada de que las clases de esta semana hayan terminado.

Malfoy me envió una lechuza esta mañana, diciéndome que podría ser mi tutor más tarde en la tarde.

Me ayuda a estudiar un poco más de dos horas, para prepararme para un próximo examen de pociones que estoy temiendo.
Una vez que terminamos, empaco mi bolso y me dirijo a Malfoy para decirle adiós.

—En realidad... —él sonríe— Yo también voy. Tengo que hablar con Trelawney sobre su estúpido ensayo.

— Está bien —me río y salgo de la sala de menesteres con Malfoy detrás.

Esta es la primera vez que Malfoy y yo nos vamos juntos, y al principio me preocupa que la gente se dé cuenta, pero nadie nos echa un vistazo cuando entramos en el único pasillo un poco abarrotado, lo que me hace sentir muy aliviada.

No hablamos mientras subimos las escaleras hacia la sala común de Ravenclaw, que está cerca del aula de adivinación.

Solo estoy pensando que pudimos lograrlo sin que nadie se dé cuenta cuando veo a Matt apoyado contra un pilar a unos diez pies de distancia, mirándonos.

Joder. Creo que mi estado de ánimo se derrumbó instantáneamente. ¿Cómo pude haber sido tan estúpida como para caminar con Malfoy?

Ni siquiera se me pasó por la cabeza que Matt nos vería.

Miro a mi alrededor desesperadamente buscando alguna forma de evitarlo, pero está parado en el pasillo por el que tenemos que pasar.

Desafortunadamente, el pasillo está casi vacío en este lado de la escuela, así que no hay cobertura. Malfoy ni siquiera se ha dado cuenta de lo que está pasando, pero me estoy volviendo loca en silencio.

A medida que nos acercamos a Matt, me calmo un poco pensando que probablemente ni siquiera me dirá nada.

Matt me ha estado ignorando desde antes de las vacaciones, así que ¿por qué debería detenerse ahora, verdad?

Incorrecto.

Lo estamos pasando cuando escucho a Matt decir en voz baja, casi mortal, —¿A qué diablos estás jugando, Cassie?

Mis piernas se vuelven gelatinosas, pero me obligo a tener un rostro sin emociones cuando me giro para enfrentarlo.

Veo, por el rabillo del ojo, a Malfoy disminuyendo la velocidad a mi lado, debatiendo si seguir caminando o no.

Aparentemente, su curiosidad se apodera de él y se para un poco detrás de mí.

—Me ignoras durante dos semanas —digo, sorprendiéndome incluso a mí misma de lo tranquila que sueno—, ¿y ahora decides hablar conmigo?

Malfoy empieza a verse incómodo, luego dice en voz baja, —Uhm, tal vez debería...

—Lo he visto, Cassie. —Matt interrumpe, mirándome sin pestañear.

—¿Visto qué? —pregunto, preguntándome de qué diablos está hablando.

—Su marca tenebrosa.

Hay silencio por un segundo, y siento a Malfoy tensarse a mi lado.

Parpadeo varias veces, esperando que esto sea solo un sueño, que esto no esté sucediendo en este momento. Mis manos se sienten sudorosas mientras respondo temblorosa,

—Matt, detente. Malfoy no tiene-

—¡Lo vi! —Matt grita de repente, descruzando los brazos y acercándose con ira. Su rostro se ve un poco rojo mientras señala a Malfoy —Vi la marca tenebrosa en su brazo. Es un mortífago, Cassie.