hateful love. ᵗᵉʳᵐⁱⁿᵃᵈᵃ

40

CASSIE'S P.O.V

Cuando Katherine regresa media hora después sonriendo con aire de suficiencia, empiezo a preocuparme mucho. Cuando cierra la puerta detrás de ella, me siento en la cama lentamente y la miro con sospecha.

—Katherine ... ¿qué hiciste?

Ella me mira, todavía sonriendo ampliamente, luego dice inocentemente:
—Nada.

Se enciende un ojo mientras se sienta en su propia cama, la preocupación me roe las entrañas. Katherine se recuesta contra la cabecera y yo me deslizo hasta el borde de la cama y digo
—Por favor dime que no hablaste con Draco.

—Relájate. —responde Katherine fácilmente, mirándome. Me mira con atención con una leve sonrisa en su rostro mientras continúa—Deberías ir a la Sala de los Menesteres ahora.

Parpadeo una vez que ha terminado de hablar, completamente sin esperar esto.
—¿Uhm, que?

—Ve a la Sala de los Menesteres. —Repite Katherine, cruzando los brazos y mirándome seriamente. Cuando no me muevo, ella se pone de pie y me acompaña a la puerta a pesar de mis protestas.

—Cassie, vete. Créeme.

—¡No confío en ti!—Exclamo, logrando evitar que me empuje hacia la puerta. —Draco probablemente esté esperando allí, y no voy a arriesgarlo todo por tu-

Katherine abre la puerta e interrumpe tranquilamente,
—Draco no va a estar allí. Solo vete, ¿de acuerdo?

Ella me empuja lo suficiente para que la puerta se cierre, y interrumpe mis palabras mientras la cierra de golpe. Cuando doy un paso atrás para evitar que me golpeen, escucho el clic del candado y
Katherine llamando a través de la puerta,
—Puedes volver adentro una vez que hayas estado en la Sala de los Menesteres.

—¡Katherine!—Giro el pomo desesperadamente, aunque sé que lo ha cerrado con llave.

Dando un paso atrás, paso mis dedos por mi cabello con frustración y me pregunto si realmente debería arriesgarme a ir. Quiero decir, Katherine dijo que Draco no estaría allí, así que no lo pondría en peligro. Por supuesto, existe la posibilidad de que esté mintiendo...

Suspiro enojada y me alejo de la puerta, decidiendo que voy a ir rápidamente a la Sala de los Menesteres.

Si Draco está adentro, me iré antes de que suceda algo. Tengo que irme antes de intentar hablar con Draco... porque sé que no podré detenerme.

Los pasillos solo tienen unos pocos estudiantes deambulando ahora que las clases han terminado por un tiempo, así que no tengo que luchar para abrirme paso entre las multitudes para llegar a la Sala de los Menesteres.
Me estremezco levemente por el aire frío, deseando que mi suéter gris fuera más grueso. Torciendo mis manos nerviosamente frente a mí, espero que lo que sea que Katherine quiere que vea que no tardara mucho.

Finalmente, me detengo frente a la entrada de la Sala de los Menesteres. Cierro los ojos y camino tres veces, pensando una y otra vez que necesito ver lo que Katherine quería mostrarme.
Cuando los abro de nuevo, la puerta se materializa en la fría piedra frente a mí. Miro rápidamente detrás de mí para asegurarme de que no me siguieron y, respiro hondo, giro lentamente la perilla.

Tan pronto como abro la puerta y me deslizo dentro, desearía poder dar la vuelta y caminar de regreso. Pero mis piernas parecen haberse convertido en piedra cuando me doy cuenta de que Draco
Malfoy está a tres metros de distancia, de cara a la chimenea y de espaldas a mí.

Maldita sea, Katherine.

No me ha oído entrar, así que creo que podré distinguirlo antes de que se dé la vuelta. Obligo a mis piernas a moverse y me vuelvo hacia la puerta, comenzando a alcanzar la manija.