hateful love. ᵗᵉʳᵐⁱⁿᵃᵈᵃ

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CASSIES P.O.V

Me estoy riendo. Estoy riéndome tan fuerte que ni siquiera puedo respirar.

—Draco— jadeo, tratando de apartar sus manos de mi estómago, que me ha estado haciendo cosquillas sin descanso durante los últimos cinco minutos. Ruedo lejos de él, riendo y agarrando mi estómago, hasta que finalmente se rinde.

—Nunca supe que tenías cosquillas. —Draco sonríe, apoyándose en un codo y parpadeando contra el sol que se refleja en el reluciente lago— Deberías habérmelo dicho antes.

Le pongo los ojos en blanco, me pongo de espaldas y me quejo, —Es marzo, ¿por qué hace tanto calor?

—Ve a nadar —dice, quitando suavemente las agujas de pino de mi cabello.

Me siento y lo miro con una sonrisa en mi rostro. Saltando, digo, —¡Sí, vamos a nadar!

—Uh, estaba bromeando —tartamudea mientras me quito la camisa, dejando solo una camiseta y unos pantalones cortos.

Viernes por la tarde, así que ambos nos hemos quitado las túnicas. Me vuelvo y veo a Draco sentado y mirándome.

—Bueno, vamos, sé que quieres.

Lo veo tratando de decidir, pero debe tomar una decisión porque se pone de pie y se quita la camisa, revelando músculos endurecidos.

Me obligo a mirar hacia otro lado, sonrojándome furiosamente.

Draco se deja los jeans puestos, lo cual probablemente sea algo bueno para mí.

Me doy la vuelta y corro hacia el agua.

Salpica contra mis piernas, y jadeo, —¡Hace frío! —puedo oírlo reír, pero todavía me suena extraño. No es frecuente que Draco se ría.

Estoy tan ocupada parada y temblando que no me doy cuenta de que Draco saltó a mi lado.

Apenas tengo tiempo para gritar, —¡No, no lo hagas!— antes de que envuelva sus brazos alrededor de mi estómago y me empuje hacia abajo con él.

Ambos salimos, yo farfullando. Miro su expresión sonriente y bromeo, —Te odio.

—No lo creo. — responde, y lo veo notar mis incontrolables escalofríos. Draco me acerca a él, y envuelvo mis brazos alrededor de él, sintiendo su piel desnuda.

El sol cae, cubriéndonos a ambos y nos quedamos envueltos el uno en el otro. Draco frota pequeños círculos en mi espalda con tanta gentileza, y de repente ya no siento tanto frío.

~*~

Si alguien pregunta cuál es el trato conmigo y Draco, no estoy segura de cuál será la respuesta. Todo lo que sé es que él me gusta y yo le gusto a él.

Y eso es todo al respecto.

Aparentemente, esto no es suficiente para Katherine.

—¿Qué está pasando contigo y Malfoy? —ella exige de repente una mañana mientras los dos palan huevos fritos para el desayuno. Levanto la vista de mi plato para verla mirándome con curiosidad—Hay algo entre ustedes dos.

Nerviosa, respondo temblorosa, —No sé a qué te refieres.

Todavía no le he dicho a nadie sobre Draco y yo, a pesar de que nos hemos estado reuniendo en la sala de menestered desde hace meses. Y la semana pasada, no hemos estado estudiando exactamente allí... en absoluto.

—Sabes exactamente a qué me refiero. —dice Katherine, metiendo el tenedor en una pequeña salchicha.

Me muerdo el labio, con tantas ganas de decírselo. Tengo que decirle a alguien pronto, o explotaré.