Obtuve respuesta aunque no creía que iba a recibirla por lo molesta que sabía que se encontraba, mi madre me escribió una carta.
"Mi sol:
Sí, estoy muy molesta y enojada por lo que hiciste y no quiero que tomes está carta como signo de mi perdón, te amo mucho pero no fue correcto que me desobedecieras de tal forma. Yo te necesitaba aquí, necesitaba que me ayudaras vendiendo esos panes. Tu abuela me intentó hacer entender de qué hacías lo correcto pero yo en verdad no puedo creer eso, jamás voy a creer que tenerte tan lejos sea lo correcto.
En fin Katrina, cualquier cosa que necesites cuenta conmigo, en lo que pueda llegar a ayudarte. Patrick lloró mucho, suele dormir en tu cama porque dice que aún le queda tu dulce olor, la abuela está contenta y se encuentra en buen estado de salud. Intentamos sobrevivir, escríbeme seguido.
Tu madre, Sam"
Y un poco de emoción se apoderó de mí, habían pasado pocos días pero aun así ya los estaba extrañando, necesitaba mandarles dinero lo antes posible.
La fiesta llegó al fin, esa fiesta en la que debía vestirme con esa ropa tan ridícula y linda al mismo tiempo, me puse también ese sombrero que me indicó. Había preparado muchos bocadillos: Pequeños sándwiches con pan muy esponjoso y suave, brochas con frutas y otras con carnes y verduras, también unos cupcakes y demás delicias, por alguna razón mis compañeras no sabían o no querían hacerlos.
Preparé una mesa hermosa, con todo ordenado de manera simétrica y por gamas de colores, el resto de las cosas las habían comprado y se veían realmente perfectas. Algunos manteles eran color salmón y otros de color fucsia, había grandes centros de mesa con grandes ramos de flores en jarrones de cristal, vasos finos y fáciles de romper.
Las primeras invitadas llegaban en talla tan pequeña, niñas que hasta traían regalos grandes con papeles tan brillantes como nunca los había recibido de tal forma, tenía mucha suerte si los recibía envueltos en papel de diario, eran algunos de esos privilegios que nadie veía: Me hubiese encantado tener tanta comida que alcanzaría hasta para comer por dos o tres semanas, con tantos globos de estilo metalizado, tener gente que me sirviera aunque no me molestaría servir por mi cuenta, me gustaría haber tenido comida suficiente como para no preocuparme por dos semanas.
Me puse ese vestido tan perfecto con tintes rosados y detalles en blanco, puse un leve brillo en mis labios y modelé un poco mis rizos para que no pareciera que tenía un desastre en mi cabeza, volví a atar mi cabello con un pañuelo color blanco para hacer juego con los déjales del vestido, hoy me sentía mucho más linda que otras veces.
Y allí estaban jugando los niños, algunos corrían por el pasto, otros con los perros de la familia que me acompañaban mientras leía, otros saltaban en colchonetas y otros en juegos inflables, mientras no dejaban de tirar basura por todo el patio. De repente noté la presencia de los señores Campos quienes también hacían juego con la temática elegida por Samanta, Pablo llevaba unos pantalones anchos en la parte de abajo y una camisa ajustada a cuadros con los primeros botones desabrochados, se veía realmente guapo, tanto que mis compañeras de trabajo comenzaron a murmurar sobre su buena imagen.
Comencé a reponer los bocadillos que faltaban y al poner un pequeño postre una mano rozó la mía, miré de inmediato luego de sacarla.
-Perdón -Dijo Pablo.
-Discúlpeme usted -Dije.
Un poco avergonzada, me fui al costado de la mesa ya que había finalizado con mi tarea, mis compañeras iban limpiando el patio de los papes descartables que los niños tiraban.
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Lamento Haberme Enamorado de tí
RandomCuenta la historia de Katrina, un alma rebelde que nunca sigue las reglas, viaja en busca de trabajo a la ciudad, aunque dentro de sus razones también se encuentra la venganza, luego de un par de días de búsqueda y sobreviviendo con lo poco que tení...