Si tan solo Marc hubiera decidido no abrir el bar ese día. Si Melody no hubiera faltado ese día al trabajo porque estaba mala. Si Marc hubiera contratado a otra banda en vez de la suya. Si no hubiera puesto sus ojos en mí para cautivarme sin él más mínimo esfuerzo... Entonces, nada de esto habría pasado. Pero no fue así, el destino se había empeñado en traer al diablo a mi lado. Y ahora íbamos de la mano camino al infierno. Atención. Esta es una novela hecha única y exclusivamente por mí, no se admite el plagio. Si quieres leerla adelante, eras totalmente de hacerlo. Y si la historia no te agrada, nadie te obliga a leerla. Contiene escenas sexuales no recomendadas para menores de 18.