Dabi, de la liga de villanos

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Luego de comer me vestí con mi traje de héroe para salir a hacer mis guardias de la tarde.

Comencé a caminar por mi ruta habitual cuando me abordaron un par de niños pidiéndome un autógrafo y fotos a los que accedí con gusto.

Llegué al final de mi ruta sin problemas y saqué mis alas para dar una última revisada aérea antes de ir a casa, iba volando por una zona un poco más oscura que el resto de la comunidad cuando vi como en un callejón se encendía una luz azul poco usual.

Bajé para revisar que no fuera nada malo y esperando que fuera algún pequeño jugando con su singularidad, pero como la vida me odia en cuanto mis pies tocaron el piso alguien me tomo las alas abrazándolas para inmovilizarlas.

Hice que regresaran a mi espalda a la vez que soltaba una patada tratando de golpear a mi atacante, el cuál al darse cuenta de lo que hacia actuó mucho más rápido y me acorralo de un solo golpe contra una de las sucias paredes del callejón.

Saqué mis alas de nuevo protegiéndome a la vez que se endurecían para evitar otro ataque y alejaba al villano.

Mi singularidad solo funge como escudo y para curaciones en las otras personas, por lo que mi entrenamiento en combate cuerpo a cuerpo fue demasiado exhaustivo toda mi vida, y aunque él es visiblemente más fuerte que yo, mi tamaño y elasticidad me dan ventaja.

Trató de volver a golpearme para acorralarme, pero esta vez evite el golpe y contraataque logrando pegarle en la boca de estómago, se echó para atrás unos segundos riendo.

-Maldita mocosa, ¡Esa me la pagas! -volvió a atacar, esta vez con su mano envuelta en un fuego azul, y por el desconcierto logró golpearme en el rostro haciéndome caer contra el duro suelo del callejón.

Con esfuerzos me levante escuchando su retorcida risa. Es la misma voz del hombre que llamó enojado a Hawks la otra vez.

-Planeaba divertirme un rato a ver cuanto tardabas en llegar al hospital, pero no creí que me fueras a encestar un golpe- lanzó una patada alta que por poco logré esquivar- o a esquivar cualquiera de mis golpes.

-¿Quién eres? -seguía evitando sus puñetazos. Es claro que esta jugando conmigo o no me hubiera permitido ponerme de pie, pero si no ha hecho lo que dijo es por que quiere algo de mí, y yo también aprovechare para ver que le saco de información.

-¿Qué quien soy yo? -rio amargamente- Deberías mejor preguntarte quien es ese al que llamas tu novio.

-¿Qué? -me descoloco un segundo, ¿Qué sabe él de Hawks y yo? Aprovecho mi distracción para ponerme contra el suelo rodeando mi cuello con su mano y poniéndose encima de mí inmovilizándome, y como si fuera poco mis alas dejaron de responderme.

-¿Qué tanto sabes del pollo idiota en realidad, niña?

-Que te importa- logré zafar una pierna para patearlo quitándomelo de encima, encima me pare sobando un poco mi cuello, me quemó levemente.

-¿Qué dirías si te digo que ese tipo es un traidor?

-Que eres un mentiroso que quiere joder su reputación de alguna manera.

-Oh vamos linda, ¿no me creerás? -se acercaba a mi lentamente mientras me mantenía en pose defensiva.

-Me atrajiste y atacaste para hablarme mal de un héroe, no hay que ser Einstein para saber la respuesta a eso- se divertía con la situación y me lo hacia saber con sus fuertes carcajadas. Logró patearme lo suficientemente fuerte para hacerme rebotar contra una pared y luego el suelo.

-Permite que me presente- tomo una de mis manos con afán de ayudarme a levantarme- Soy Dabi- besó mi mano- parte de la liga de villanos, y el reclutador del héroe traidor.

Amor alado (Hawks x Lectora)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora