Tiritas del tiempo

Capítulo 81. Siempre estuvo ahí

Durante los días que paso con Mónica hubo un cambio considerable, paso de mamá a mami lo cual le hacía muy feliz, fue a su cita con Amado el jueves donde la paso muy bien, de verdad el era distinto al igual que su compañía, estaba lleno de sueños que se dispuso a compartir con ella, quería sobresalir en su carrera pero a la misma vez deseaba lo que ella tenía o bueno lo que el pensaba que tenía, vivía solo en un departamento bastante grande, durante un momento de la noche el se sincero con ella, descubrio que hace no tanto estuvo casado así que comprendía porque ella no quiso ir a la cama con el cuando se conocieron, para el también era su primera vez con alguien diferente a su esposa, por ahora no tenía deseos de pasar a ese nivel pues era a la antigua, la quería conocer, pasar más tiempo juntos, lo que Altagracia agradeció internamente pues era exactamente lo que ella quería.

- Sabes te envidio un poco -- sirve su copa -- Tienes una hija que te espera en casa

- La verdad no Amado -- sonríe leve -- Ella vive con su papá, esta conmigo durante la tarde pero luego se va

- Creí que vivía contigo -- se endereza -- Me disculpo...

- Tranquilo -- niega -- Al igual que tú, vivo sola rodeada de paredes -- le da un sorbo a su vino -- Entre muchos recuerdos que no estoy dispuesta a soltar aún

- Nunca creí que conocería a una mujer que me entendiera tan bien -- sonríe leve tomando su mano -- Es difícil dejar atrás tantos años...

- Lo sé -- ríe bajo -- Pero te diré una cosa -- se acomoda -- Ya han pasado dos años, para esta altura de la vida pensé que podría deshacerme de todo -- admite -- Pero a veces hasta sigo dejando su lado de la cama ahí libre

- Yo pongo una almohada -- revela -- A veces despierto abrazado a ella -- ríe

- Definitivamente tú estás peor que yo -- niega sonriendo -- Cuánto tiempo estuviste casado?

- Siete años y llevo un año de divorcio -- la encara -- Y tú? Cuántos años pasaste a su lado?

- Diez años... tres meses y veinte días -- murmura -- Días después supe que fue a un hotel... con alguien más -- da de hombros -- Luego ya no supe cuanto tiempo seguimos "juntos" hasta el divorcio, paso todo muy lento y rápido a la vez, tampoco recuerdo mucho

- Era cómo si te hubieras muerto en vida no? -- pasa el pulgar sobre su delicada mano pues seguían entrelazados -- Me paso también... tuve que alejarme un poco del hospital, sino hubiera matado a varios pacientes -- bromea

- Si -- concuerda -- Yo tuve que enfocarme en mi hija, me comenzó a odiar por el divorcio, después me convertí en una adicta al trabajo -- ríe

- Somos un desastre no? -- inclina la copa hacía ella

- Uno bastante grande -- choca leve su copa -- Sabes deberías deshacerte de las fotos -- señala los portaretratos -- Ponlos todos en una caja y la dejas fuera de tu alcance -- aconseja

- Voy a tomar ese consejo -- sonríe -- La verdad no sabía si llamarle para preguntar si las quería, fue ella quien las puso allí

- Mejor mantente un poquito distanciado, preocúpate por ti -- deja la copa sobre la mesa -- Fue ella la que quiso irse con el instructor de pilates

- Cierto -- la imita -- Quieres pastel?

- Por ser tú, te lo acepto -- ríe -- Si te quedo igual de bueno que la cena, por qué no?

- Me halagas! -- se levanta -- Es de chocolate, espero que no seas alérgica

Después del pastel que he de confesar, estaba muy bueno, Amado le pidió un taxi pues ninguno se encontraba en condiciones para conducir esa noche, intercambiaron besos en la mejilla en la recepción, el insistió en acompañarla hasta abajo, sólo para checar que llegara bien hasta el taxi, las siguientes semanas continuaron viéndose pero sólo en plan de amigos, ninguno estaba listo para algo más, aunque no se podía negar que existía cierto aire entre ambos, de verdad Altagracia le gustaba pero se notaba en su mirada que ella aún amaba a su ex, el no estaba listo para algo así, tampoco merecía salir lastimado, por lo que quedaron así, ella se concentro más en su empresa e hija, le toco muchas veces tener que ir al departamento de Jose Luis y dar de cara con una nueva conquista, las peleas comenzaron justamente por eso.

El debía respetar la presencia de Mónica allí, aunque el reclamo en realidad fuera por los celos que le generaba ver que el ya andaba recuperando su vida, le dolía en especial porque desgraciadamente sentía amor por el, ahí fue cuando llegaron a un acuerdo, el no traía mujeres a la casa si ella no llevaba hombres a la suya cuando Mónica estuviera ahí, ya después podía hacer lo que quisiera al igual que el, ese trato se mantuvo por rato largo hasta que el se consiguio una relación formal, sin embargo la chica no se quedaba a dormir allí, Mónica comenzó a ir a su casa entre semana para dormir pues detestaba a la novia de su papá, eso de a poco hizo que se acercará mucho más a Altagracia, quien todavía no estaba acostumbrada a la presencia de esa mujer, a pesar de que sólo le duró por seis meses, ella estuvo presente en el cumpleaños número 5 de Mónica.

Ella no invitó a Martín, que bueno era cómo su novio porque en primera estaba a nada de terminar con el por presionarla tanto para ir a la cama y en segunda si lo hacía sería presentarle alguien formalmente a su hija para lo cual no se sentía lista aún, al final ignoro el hecho de que esa mujer estaba allí para disfrutar con Mónica, fue un cumpleaños realmente lindo, durante la hora de fotos le toco hacerlas con Luis, unas cuantas veces sin querer la había tocado, tuvieron que disimular aquella corriente eléctrica que invadió a ambos, fue ahí que el se dio cuenta que su relación con Eugenia no iba a durar, todavía sentía muchas cosas por su ex esposa, la verdad sólo estaba con la muchacha en un intento de reemplazarla pero pues era imposible.

Días después termino con ella, fue ahí cuando volvió a andarle detrás a Altagracia, bueno fue cuando ella terminó con Martín, la verdad no era nada sencillo llegarle, recibió varías cachetadas, golpes en las manos, en el estómago... en fin, pero estaba seguro de lo que quería y eso era ella, dedicó todo ese año a mejorar su relación con Altagracia, cuando casi se daba por vencido logro hacerla reír... la esperanza entro en el cómo si de un torbellino se tratara, acababa de ver a la Altagracia que le avento una botella de agua en el parque, aquella mujer seria y dura que se invento durante el divorcio se había ido por escasos 20 segundos, dejandola al descubierto, fue allí que lo supo, ella regresaría a el, sólo era cuestión de tiempo, Altagracia también se dio cuenta de algo ese día, en lo que se mataba de la risa porque el piso uno de los juguetes de Mónica y se hizo mierda en el piso, el la estaba mirando igual que en la boda, al principio pensó que se volvió loca pero el mantuvo esa mirada hasta después de que ella dejará de reír, Navarrete aún la amaba...

- Ven -- le extiende la mano -- Si Magda ve en el piso a su protegido favorito, me andará dando una lección moral de por qué está mal golpear a la gente

- Dijiste que en tu casa nunca hay desorden -- la toma -- Cómo explicas este juguete que casi me mata?

- Es sólo uno! -- mira su mano al sentir esa corriente de nuevo -- T-te vas a levantar o esperas que lo haga yo?

- Sobre esos tacones? -- se apoya sobre su rodilla para ponerse de pie -- Terminarás en el piso antes de que te des cuenta

- Perdón? En casi 16 años que me llevas conociendo -- lo jala -- Nunca me caí de mis tacones, ni estando ebria, ahora vete de mi casa por favor que destruyes la maravillosa atmósfera de paz -- camina a la puerta

Muchísimas gracias por acompañar esta historia llena de drama y amors :3

Me hace muy feliz que les termino gustando tanto♡

Hoy estás tiritas llegan a su fin, pero por suerte volvieron a unirse en Como Digas :3

Soy AnaPau y les deseo una bonita mañana/mediodía/tarde/noche/madrugada