Tiritas del tiempo

Capítulo 35. Dibujame!

Durante loa siguientes meses las cosas fueron un poco complicadas, Luis se dividía entre la universidad, los entrenamientos y la constructora, pues su padre lo impulsaba a aprender cómo funcionaba todo, Altagracia consiguió una beca completa gracias a la música, no era exactamente a lo que se quería dedicar pero pues le servía, no quiso la ayuda de sus abuelos para encargarse de los gastos, ya era mayor, estaba casada, podía con esto, decidió ir para administración junto con Luis, claro que no era lo único que ocupaba su tiempo, todo lo que fuera diseñar planos llamaba mucho su atención por lo que también le entro ahí, poco a poco descubrió cierta pasión por las artes, aprovechando que tenía su estudio en la parte de arriba compro materiales de arte, el lugar era bastante grande por lo que no interferia con el espacio del piano.

De vez en cuándo debía presentarse en conciertos con el piano, ya que en eso consistía su beca, pero lo adoraba, cómo aún estaba preparando las canciones para aquel disco, todavía no subió a un escenario pero con el piano pudo sacarse aquella espinita de cómo sería estar allí algún día, claro que no iba a ser lo mismo pero pues era algo no? Cómo pagaba sus libros y materiales? Fácil! Vendiendo cuadros, de vez en cuándo era niñera de la vecina, no quería depender del dinero de Luis. Justo ahora estaba en su estudio terminando un cuadro, la casa ya estaba amueblada por completo, vender cuadros era un gran negoció, con ese dinero pudo ayudar a Luis para completar el monto necesario para cubrirlo todo.

- Ya estoy en casa! -- cierra la puerta dejando las llaves en una mesita -- Amor? Estás en la cocina? -- camina para allá con una sonrisa -- Que raro, suele estar aquí a está hora

Regresa a la sala, buscando el celular de ella sobre la mesita, si se encontraba allí es porque estaba en casa y efectivamente estaba ahí, fue al cuarto revisando que estuviera allí, paso al baño pero nada, cómo venía de la constructora se dedicó a guardar su corbata junto el saco, remango su camisa y la fue a buscar al estudio, a penas terminó de subir las escaleras la encontró en el piso pasando el pincel sobre aquel lienzo, en el escritorio se encontraba su desmadre de papeles, libros de la universidad, cuadernos y otras cosas más, sobre el piano estaba el libro de partituras abierto por lo visto estuvo practicando, en la mesa de artes pues... ahí todo era un caos con las pinturas.

- No sé por qué no te busqué aquí primero -- ríe

- Amor! -- se gira -- Llegaste temprano hoy -- dejá el pincel para ir a saludarlo

- Linda, ya son las siete -- sonríe negando

- Perdón! -- le da un beso -- Se me pasó mucho la hora, cuidado que no te quiero manchar -- aleja las manos

- No importa -- la toma de la cintura -- Lavare la camisa después, cuándo se va ese cuadro? Te está quedando muy bello

- Pues mañana en la tarde -- sonríe -- Y gracias eh! La verdad estaba pensando que lo arruine

- Está precioso -- le roba un beso -- Igual que tú

- Bobo! -- ríe -- Escuchá no me falta mucho para acabar, pero si quieres puedes ir dándote una ducha y ya luego bajo para empezar con la cena

- Me dejas hacerte compañía? Te extrañe luego de la universidad -- pide

- No estás cansado mi vida? -- besa su mejilla varias veces

- Tienes aquí un sofá -- señala -- Mientras tú pintas, yo me acuesto un rato

- Andele -- asiente -- Que quieres cenar? -- regresa a su área de trabajo

- No sé -- va al sofá -- Compraste ese libro de recetas hace poco -- se quita los zapatos -- Quieres que intentemos algo de allí?

- Oh! Me vas ayudar? -- ríe hundiendo el pincel en la pintura

- Siempre te ayudó! -- se queja acomodando el cojín

- A que se acabé la comida? Pues si! -- dice para molestarlo

- No seas mala! Que yo te lavó las verduras -- enumera -- Los trastes, no dejó sobras, checo el agua cuándo metes la pasta

- Mi amor haces todo eso cuándo te lo pido -- se burla

- Pero hago no? -- cruza los brazos

- Cierto -- asiente -- Ahí te doy la razón, que tal estuvo tu día? Muy pesado?

- Un poco -- suspira -- Papá presiona demasiado -- cierra los ojos -- Creó que tendré que dejar los entrenamientos, sino casi no podré verte

- Mi amor, es tu sueño -- se preocupa

- Lo es pero tengo uno más grande ahora -- se acomoda

- Más grande que ese? -- dice extrañada -- A ver cuenta el chisme

- Quiero que tengamos la vida que nos merecemos -- dice sincero -- Llevarte de viaje, que tengamos nuestra casa, aquí no podemos tener a nuestros hijos

- Momento! -- se gira -- Hijos? -- sonríe -- Cuántos quieres o que?

- Quiero cinco -- ríe

- Luis! Son muchos niños -- niega

- Mi amor así tendrán con quien jugar, siempre habrá alguien que los apoyé -- explica -- Y bueno, los juegos serían más divertidos

- Cinco niños -- dice sin creérselo -- Debí preguntar esto antes de casarnos -- bromea

- No te digo que serían cinco de trancaso -- advierte -- Podríamos comenzar con dos, que se lleven un año o dos luego vendrían los otros

- Ya lo tienes todo planeado tú! -- vuelve a la pintura -- Cuándo me lo ibas a decir?

- Después de que llegará el segundo -- ríe

- Que malo! -- niega -- Esperarías a que me encariñe para que te diga que si

- Pues claro -- sonríe -- Cuántos quieres tú?

- Tres -- humedece el pincel -- El último lo tendríamos ya cuándo los otros dos fueran un poco más grandes, así no nos quedamos sin nada que hacer cuándo sean adolescentes -- ríe

- No suena mal tres -- la ve -- Dos niñas y un niño

- Quieres dos niñas? -- sonríe

- Si pero el niño tiene que llegar primero, así me ayuda a cuidar de sus hermanas -- sentencia

- Aja y cómo vas a lograr que llegué primero el niño? -- se aleja un poco para ver cómo le estaba quedando

- Tu tía es bruja -- bromea -- Le pedimos que nos eche una manita no?

- Te pasas en serio -- niega -- Cómo le vamos a pedir eso? Estás loco

- Por qué!? A poco no quieres primero el niño? -- se sienta

- La verdad si -- ríe admitiendo -- Siento que la niña se llevaría toda tu atención

- Ahí está! Nos conviene pedirle que nos ayudé -- suelta algunos botones de su camisa -- Pulga, psss -- llama su atención

- Dime -- se gira -- Amor! Ya te vas andar desnudando? -- ríe -- Dejá que terminé aquí al menos!

- No! Eso en la noche -- rueda los ojos -- No se te ocurrió hacer una pintura o dibujo de mi? -- se levanta -- Digo! Mira nomas el cuerpo que me cargo!

- Papi, quién te dijo a ti que yo no te dibujé ya? -- limpia su pincel

- Estás jugando! -- niega

- En mi mesa de arte, hay un cuaderno negro, búscate allí -- ríe

- Es en serio? -- va hasta allá