-Así que... ustedes dos son... ¿amigos?
Kyle desvió la mirada a todos lados, evitando encontrar la de Dylan.
-No estoy en contra, pero saben que es una locura, ¿verdad? Tú, Dylan, eres literalmente todo lo que representa al lado norte y tú, Kyle, p...
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Kyle
Las prácticas de Dylan se habían terminado cancelando por el hecho e que esa noche era el baile de bienvenida, así que su amigo regresó temprano.
Como Kyle apenas podía moverse dentro de casa, los chicos no planearon nada para salir, pero se entretuvieron hablando de música. Ya que parecía que era el mejor tema de conversación que fluía con facilidad entre los dos. Eran cerca de las ocho cuando el de ojos verdes prometió poner algo diferente a lo que solían escuchar juntos.
Le dio el gusto a Dylan de reproducir la música que su amigo siempre creyó que escuchaba. El hard-rock y el metal se adueñaron de las bocinas por un rato.
—Te has dado cuenta que Baverly suele escuchar casi lo mismo que nosotros, ¿verdad? —Kyle solo asintió mientras buscaba la siguiente canción—. Sin embargo no le gusta el screaming. Dice que no entiende qué tiene de bueno gritar una canción.
—Creo que la respuesta a eso depende de cada quien —se encogió de hombros y, cuando levantó la mirada, recibió una invitación del chico a que se explicara—. Baverly dice que no sabe qué tiene de bueno, ¿no? Yo digo que tiene mucha emoción.
—¿Emoción como furia, odio...? —preguntó, sin captar por completo la idea que Kyle intentaba transmitirle.
—No necesariamente. Escucha esta canción —pidió, al tiempo que reproducía una canción que siempre le llegaba hasta lo más profundo y le emocionaba cada vez que la escuchaba.
La canción realmente no tenía gritos, solo los coros, principalmente los del final, pero era perfecta para explicarle al castaño que quería decir con «emoción». La letra hablaba sobre un hombre, quien había recibido demasiados golpes en la vida y que intentaba resistir el dolor, pero estaba simplemente roto.
—Escucha el final —le señaló a su amigo una vez más—. ¿Qué es lo que sientes cuando grita las últimas palabras? A mí lo que me hace sentir es que el cantante está realmente desesperado por el dolor, es demasiado y no puede soportarlo, por más que intente manipularlo para que sea menor. No encuentras ese mismo tipo de emoción en varias canciones pop de ahora.
Dylan sonrió ampliamente, lo que automáticamente hizo que Kyle también sonriera.
—Eres un dramático —terminó diciendo el castaño, siendo la reacción completamente opuesta de lo que Kyle esperaba.
Mientras sus miradas volvían a conectarse. En ese breve momento, sin que nada pudiese controlar sus pensamientos, su voz interna terminó por admitir que los ojos de Dylan eran... lindos. Eran brillantes, llenos de vida. Se atrevía a decir que eran únicos. Podría estar seguro que nadie más en el mundo tenía la misma chispa en los ojos a como la tenía el castaño.
