39 | criminal.

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Fueron pocos los días necesarios para que tanto la prensa como todo el público en general comenzara a hablar del supuesto ataque en contra de las oficinas de una de las compañías de entretenimiento más grandes en Coreal del Sur.

Por primera vez en mucho tiempo, todos los fans de todos los artistas bajo la marca habían estado del mismo lado; todos habían dado su muestra de apoyo ante los artistas que probablemente debían sentirse asustados ante lo que estuvo a punto de sucederles.

Aquella noche, la luna estaba siendo testigo de todas las palabras que figuraban en la sala de reuniones de la compañía. Había sido ya un día entero en búsqueda de razones, sospechosos y culpables, mientras repetían una y otra vez la cinta de grabación del lugar.

¿Cómo había sucedido?

La seguridad interior de la puerta había sido provocada; aquello había dejado al par de artistas a fuerza en el exterior del edificio, lo que significaba que, como era de imaginarse, alguien con acceso a la seguridad de la compañía había tenido mucho que ver en el ataque.

Habían sido más de tres veces de declaraciones para ambos artistas, revisiones sin descanso de la cinta de la cámara durante el día entero y también la noche del suceso.

¿Por qué no había nada?

Nadie que no hubiera debido estar ahí estuvo antes del ataque. De las decenas de artsitas, fueron solo Taehyung y Chaemyeong al lugar en todo el día. Uno tras el otro.

Aquella rutina de visitar la azotea podría haber sido conocida sólo por empleados de la compañía. Pero, ¿quién?

Mientras la legalidad del asunto continuaba preocupándose, la noticia era publicada en Internet.

El desconcierto y preocupación parecían haber abrazado todas las redes sociales y el silencio había comenzando a adornar los foros. Nadie quería decir nada, porque todos estaban sensibles.

El simple hecho de pensar en que aquello podría haber acabado con la vida de, quizá, no sólo uno de los artistas, sino ambos, había hecho reconocer a todos los fans que nadie estaba seguro, y que en cualquier instante el hasta luego podría transformarse en un para siempre.

— La noticia fue tendencia pero nadie más está hablando ahora —pronunció Miso, recostándose en el sofá de la sala de estar de su casa.

Minseon observaba fijamente la pantalla de su celular, aún mientras escuchaba a sus amigas hablar.

— ¿No creen que fue demasiado? —susurró la muchacha, recogiendo sus cabellos rubios para acomodarse en su lugar.

— Chaemyeong tiene tantos enemigos... —respondió Miso, encogiéndose de hombros—. Aún tengo vividamente plantada la imagen de ella abrazando a Taehyung en su primer concierto. Ella jamás tuvo respeto

Las demás muchachas parecían darle la razón a la más alta, por lo wue Minseon asintió levemente.

— Siempre ha estado metida en problemas, ¿no eres tú la primera en despreciarla? —susurró Hyomi, alzando una ceja—. Te recuerdo que es la primera idol en toda la carrera de tu amado Jungkook a la que se le atribuyen sus sentimientos

— ¡Eso es verda! —vociferó Miso—, tu propoia prima metiéndose con la persona que quieres. Qué molestia —la muchacha negó con la cabeza, removiéndose en su lugar—. Incluso si puso en peligro la vida de Taehyung con su tontería, creo que se merecía el susto

Hyomi, como Taeha, Yubin y Jaena alcanzaron a asentir, dándole la razón a la muchacha frente a ellas. Minseon se limitó a apretar los labios, sin decir más.

❜ Big Hit's Soloist ── BTSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora