❜ Big Hit's Soloist ── BTS

45 | bullicio.

La sala se encontraba en completo silencio después de que Nahyon había salido de ella.

Taehyung agradecía que aquel suceso no hubiese avanzado a algo de lo que todos se pudieran arrepentir, especialmente Chaemyeong, cuando se diera cuenta de que todo lo que acababa de hacer podría ser utilizado por Nahyon a su favor.

Apesar de que coincidía en que aquella muchacha merecía un castigo, ahora mismo solo podían esperar hasta que Mel despertara y dijera a todo el mundo la verdad: que aquel teatro hecho por la pelirroja finalmente se acabara.

— Considero extraño verte enojada —murmuró Jungkook, intentando romper el silencio, mientras Taehyung caminaba con lentitud en dirección a los dos menores—, pero creo que finalmente te desahogaste

La muchacha se cruzó de brazos, dirigiendo la mirada hasta la salida por la que la mayor había salido hacía tan solo unos pocos minutos.

— ¿Estás bien? —cuestionó el castaño, mirando a la muchacha con algo de curiosidad. Chaemyeong asintió levemente, con la mirada perdida.

— ¿Creen que ella dijo la verdad? —susurró, con algo de duda—: ¿creen que simplemente la juzgué más allá, y no tuvo mucho que ver? Hay cuatro miembros más en el grupo, después de todo

— Creo que fue muy cínica

Las palabras de Jungkook llamaron la atención de Taehyung. El castaño frunció las cejas, al notar que Jeon finalmente había encontrado su posición respecto a Nahyon. Él se había limitado a no decir nada sobre la pelirroja nunca, pero parecía que la discusión que acababa de presenciar le había ayudar a tomar una decisión.

— Desearía haberle dicho algo más —susurró Chaemyeong, con un tono lleno de molestia, mientras miraba a Jungkook.

— En mi opinión, no debes atacarla —intervino Taehyung—, solamente necesitas esperar un poco. No va a salirse con la suya demasiado tiempo, alguien va a declarar y entonces estará arruinada

Jungkook le dió la razón, y ambos esperaron a que la muchacha dijera algo.

Chaemyeong se mantuvo en silencio, esperando, en el fondo, que los dos tuvieran razón.

(...)

Ese día, se hacían exactamente dos semanas desde que Mel había sido descubierta en su dormitorio. Los doctores se mantenían firmes en que la muchacha despertaría pronto y que los daños no habían sido graves. Se habían detenido a tiempo los efectos de las decenas de medicamentos que había ingerido y, según ellos, era probablemente que no fuera necesario demasiado tiempo para que la menor recuperara la conciencia.

Durante ese período, ninguno de los artistas en la compañía había sido capaz de recuperar sus actividades con normalidad. La situación perseguía como un fantasma a todos los que practicaban en la compañía y llenaba de incertidumbre a quienes querían que ella se encontrara bien pronto.

El Internet en general ya había comenzado a molestarse con la falta de información sobre la situación de la chica, y el CEO de la compañía lo sabía bien. Por eso, el comunicado que informaba las últimas noticias había sido publicado.

Tras un párrafo prometiendo a los fans que todos habían hecho su mejor esfuerzo para que Mel mejorara, otras pocas líneas diciendo que ahora se encontraba estable, y una promesa de que todos saldrían de eso, las personas habían encontrado un camino de paz entre tanta tormenta. El informe sobre el caso de la azotea no tardó en llegar, en otra publicación, informando que hasta ahora no se habían encontrado culpables pero sí varios sospechosos. Nada era concreto respecto a aquello, así que la gente seguía molesta.