Capítulo 19

778 48 93
                                    

Tal como le había dicho Lily, sus padres mandaron a ella y a Hugo al número 12 de Grimmauld Place para pasar el resto de las pequeñas vacaciones.

Ya habían pasado un par de días desde la cena de navidad en La Madriguera, ahora los días de Rose se basaban en levantarse, desayunar, leer, almorzar, leer, cenar y tratar de dormir lo mejor posible, aunque a veces le costaba.

En la mayor parte del día se encontraba su tía Ginny en casa, quien trabajaba en la sección deportiva para el periódico. Su tío Harry solía llegar a la tarde noche, cuando no estaba en Hogwarts trabajaba en el Ministerio.

Lily compartía su habitación con ella, y Albus con Hugo. James era un caso aparte, salía muy seguido y aunque solo era un año mayor decía que eran muy chicos para experimentar lo que el experimentaba.

Eran las nueve de la mañana y Rose se encontraba sentada en la cama, en medio del silencio, mirando un punto fijo. Cuando al fin decidió pararse dudó en vestirse o quedarse con el pijama puesto. Optó por la segunda opción, aquella remera algo vieja de Holyhead Harpies, su equipo de quidditch favorito, no era tan impresentable junto con el jogging negro que tenía en la parte de abajo.

Ni bien entró a la cocina sintió cierto escalofrío por la correntada de aire helado que entró por la ventana, la cual cerró inmediatamente. Mientras se servía un vaso de agua escuchó voces que venían de la sala, asi que se acercó pensando que encontraría buena compañía a estas horas.

Se arrepintió en el momento que vio a Daven con un baúl y a su padre hablando con su tía Ginny. Ya era tarde para salir corriendo, la habían visto.

— Rosie, ven aquí— le dijo la mujer. Ella se acercó con las mejillas algo rojas por la pena que sentía al estar en pijama frente a los tres bien vestidos— Daven se quedará aquí hasta que vuelvan todos a Hogwarts— Rose asiente, no le salían las palabras— creo que ustedes dos se llevan bien, él dormirá en la habitación desocupada que está al lado de la de Al, ¿lo acompañas?

— Claro.

Le dio una sonrisa de cortesía a Marcus, el padre del adolescente, y salió de allí con el castaño siguiéndole.

— No sabía que estarías aquí también— le comenta amigable.

— Si... mis padres trabajan todo el día— Rose trató de no sonar tan pesimista— ¿y que hay de tí?

El baúl los sigue en el aire mientras van subiendo las escaleras, hechizo seguramente hecho por alguno de los adultos en la sala para que no tuviera que batallar con la subida.

— Mi hermana logró convencer a mi madre de pasar las vacaciones en Estados Unidos y se fueron por esta semana y otra... mi padre está arreglando asuntos del trabajo todo el día— responde rodando los ojos.

Ella le dio una mirada de comprensión y cuando llegaron al piso indicado le guió hasta la habitación desocupada.

Que tan desocupada no estaba.

Había una cama limpia, pero el lugar estaba oscuro y lleno de cajas.

— Tu tía me dijo que había que sacar un par de cosas— dijo rascándose la parte de atras de su cabeza. La pelirroja rió por lo bajo.

— ¿Un par?

— Me entretendré.

— Te ayudo, no tengo otra cosa que hacer.

Daven le sonrió de lado agradeciéndole y empezó a mover las cajas que tenía más cerca hacia la salida.

Ella corrió las cajas cerca de la ventana y abrió las cortinas para que entrara la luz matutina. Tembló un poco cuando se abrió abruptamente dejando pasar el frio invernal, pero la cerró para continuar con el desorden.

Rose Weasley || SCOROSE || (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora