XLV. Dicen por ahí...

234 53 5
                                    

— ¿Esto no es de mala suerte o algo del estilo?

—Para nada, a ustedes disimulen que son princesas por título y aquí no pasó nada. —susurra Jimin discretamente. Hosook está a poco de tirar todo en la mesa.

—pero no somos princesas ¿Cómo lo finjo?

—Ya lo finges bien con cómo estás vestida.

—En teoría si lo soy. —murmura Jeonggoo llevándose comida a la boca. Namjoon tenía razón, lo que vale la pena toda la espera y tonterías que vio, es que la comida es deliciosa y la dejan beber. Cosa que usualmente no la permiten. Magia de estar bien vestida.

—Es decir, de las tres, soy la única plebeya metida en este lío. —lloriquea Hosook y chilla leve por la caricia en la espalda, gira a la derecha, consigue a Taehyung asomado por encima de Jimin. Le hace gesto de silencio y le guiña el ojo.

Hosook hace un puchero pronunciado. Esto no le parece correcto ni una buena idea. Para iniciar la celebración por la boda, hay un banquete enorme. Luego de eso será un baile y coloquio habitual. Sigue incluso más allá de que los novios se vayan a iniciar su interacción matrimonial propiamente dicha.

Por otro lado, su problema aquí es que la sentaron en la mesa principal donde van los reyes, los recién casados y algún que otro militar de alto rango como lo es Namjoon. Sin embargo, oficialmente él no tiene compañía. No a Jeonggoo al menos.

Lo mismo para ella. Sujin no puede invitarla aquí, no es su reino y sus padres no dejan de verla con malos ojos. Aquí todo está terriblemente desordenado. Hoseok es incapaz de explicarse cómo es posible que el rey no la haya echado de la mesa.

Qué es lo que pasa por su mente en estos instantes a aparte del disgusto que le genera tener a Yoonji al lado. Su indiscreción al respecto llega a ser incómodo.

—Deja de comportarte como un niñato haciendo berrinche—regaña Yoonji en voz baja, comiendo para disimular que le habla—. Te guste o no, soy tu esposa y debo estar aquí sentada. Ella-

—Es mil veces mejor que tú, pero debo quedarme con el lastre que eres. Aun ahora lamento que el embarazo no te matara. —responde con la suficiente voz para que Taehyung lo escuche, pero finja no hacerlo por no armar una escena.

Tienen a más de quinientas personas aquí. Sea lo que sea que ambos estén discutiendo, no puede ser en voz alta. Afortunadamente las demás mesas están lo suficientemente lejos. Taehyung guarda la esperanza de que no suceda nada grave en lo que resta de festividad. Sería penoso y tiene muy claro que su papá sería el culpable de ello.

Como si estar espiando los baños no fuese suficiente.

. . .

—Se ven muy divertidos los dos.

—Parecen enamorados, en realidad...

—Los amigos también se enamoran, tan solo que de una manera diferente y sin quitar que podrían hasta dar la vida por el otro. Un lazo fuerte, bonito y que los ayudará a engañar a todo el mundo.

Yoonji suspira, viendo a Jimin bailando con Taehyung. La muchacha empeñada y emocionada en hacerlo. Suele bailar sola, por lo que esto es un gran cambio. Llama la atención de forma poderosa por lo grácil que llegan a ser sus movimientos.

Incluso con la rapidez que ameritan algunas tonadas que brinda la banda y su cantante. Taehyung se inclina del todo sobre ella, ambos sudados por lo mismo. Al levantarse escuchan aplausos. Jimin le sonríe y le susurra algo al oído.

Taehyung asiente antes de apartarse. Jimin va hasta donde se encuentra Yoonji.

—Me alegra que te diviertas en tu boda. —dice Yoonji. Jimin toma asiento y una copa de champaña que trajo un mesonero. Agradece en voz baja.

Queen Ilsig || YoonMinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora