Loubby o Pacosita - "Me gustas"

"Hola, soy Rosita"

Rosita: (Con las manos y el rostro pegados a la ventana del coche con total expectación) ¡¿Ya puedo bajar abuela?!

La señora Beackley se dedicó a estacionar el coche soltando un suspiro, odiaba los coches pequeños.

Señora B: Todavía no Rosita.

Rosita volvió a observar la preparatoria, cientos de chicos estaban allí conversando en grupos, era su hora de bajar y hacer amigos ¡¡Haría muchos de ellos!! jugarían, irían al cine, tomarían helados, e irían a divercentro ¡¡y cielos!! tal vez hasta comerían una hamburguesa.

Ella nunca las había probado pero internet decía que eran deliciosas.

Una chica pelirroja pasó junto al coche y Rosita no pudo evitar mirarla embobada y cada vez más emocionada ¡Esa chica tenía el pelo rojo! ¡¡¿Las personas podían tener otro tipo de color de pelo?!!

Brincó cada vez más emocionada en el asiento trasero.

Rosita: ¡¿Ya puedo?!

Señora B: No Rosita. Tengo que ir contigo para firmar unos papeles.

Pasaron dos segundos.

Rosita: ¡¿Y ahora?!

Señora B: (Soltando un suspiro) No Rosita.

La impaciencia iba a matarla. Por fin su abuela pudo estacionar el coche y en cuanto le abrieron el seguro de la puerta, saltó fuera haciendo una voltereta y quedando de pie sobre la acera chillando interiormente.

Preparatoria. Preparatoria. Preparatoria.

Señora B: Rosita – puso una mano en su hombro para calmarla – recuerda que no estamos en casa, tienes que respirar. Respira, sonríe y sé tú misma – se mordió los labios – mejor, sé tú misma en sesenta por ciento.

Rosita: (Distraída por un chico vestido de camiseta azul que pasó haciendo una voltereta en un skate siendo alabado por un grupo de chicas) ¡Ajá! ¡Ajá!– asintió con la cabeza varias veces.

Señora B: Perfecto - le sonrió a su nieta - entonces ¿Estás lista?

Rosita: (Sujetando su bolso con fuerza) ¡Yo nací lista, abuela! ¡Wiiiiii! ¡Asistiré a una preparatoria!

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Director: Espero que el campus sea de su agrado señorita Vanderquack y se adapte con facilidad.

Rosita, saltando por los pasillos sin escuchar mientras tomaba panfletos de los corredores y tomaba fotografías de los casilleros personalizados que se encontraba por el trayecto ¡¡Todo era demasiado nuevo!!

Director: (Deteniéndose a observarla) Señorita Vandequack ¿Está escuchándome?

Rosita: (Emocionada x 5) ¡No dormí anoche por leer por novena vez el reglamento! ¡Y me he aprendido el mapa del campus de memoria!

Director: Eso es perfecto, pero cualquier pregunta que la atormente puede hacérsela a su profesor.

Rosita: ¡Siii!

El director hizo un gesto ante el optimismo de su nueva alumna. Era más hiperactiva de lo que le habían mencionado, pero no tenía otra opción, Mackpato estaba subvencionando a esa chica tanto como a los tres sobrinos. Ante todo el dinero.

Director: (Abriendo la puerta del salón) Profesor, le he traído a su nueva alumna.

Rosita guardó su móvil y entró evitando saltar al ver la mirada del director.

Respira Rosita, sé profesional. Si. Solo soy una chica normal.

De pie frente a un grupo de chicos Rosita se emocionó tanto que su corazón estuvo a punto de salírsele del pecho. Todos le miraban. Perfecto. Si sentían curiosidad por ella entonces hacer amigos sería muy sencillo. Solo tenía que esperar y se presentaría. La presentación era muy importante.

Profesor: Muy bien señorita Vanderquack, marche a sentarse al primer asiento vacío que... MM - miró a la distancia - siéntese con Luis.

Pero... - la sonrisa de Rosita se apagó - ¿No iba a presentarse? ¡La televisión le había mentido!

Rosita: Eh... - miró los pupitres y divisó el que se encontraba vacío, a su lado había un chico vestido de sudadera verde junto a la ventana que se encontraba ensimismado observando un móvil - Bueno.

Caminando hasta su lugar sonrió a los demás moviendo la mano con timidez.

Hola nuevo amigo. Hola también nuevo amigo. Hola definitivamente tú, nuevo amigo.

Rosita se sentó junto a Luis el que tenía el cabello rubio platinado pero solo podía verlo por un mechón que le sobresalía. Para estar en plena clase llevaba la capucha de su sudadera puesta y no parecía importarle.

Este es el momento Rosita. Tú puedes.

Rosita: (Mi primer nuevo amigo) Hola - saludó enérgica - Luis se demoró en girar la cabeza hacia ella frunciendo el entrecejo, alzó su mano hacia él - Soy Rosita.