Loubby o Pacosita - "Me gustas"

"Amigos"

Rosita comenzó a bajar las escaleras encaminándose hacia el gran comedor sin dejar de apretar sus manos con nerviosismo ¡Había sido tan tonta! Hugo y Paco Mackpato no eran clones de Luis su supuesto nuevo amigo, eran de verdad trillizos ¡Ella ni siquiera sabía que era posible nacer de tres! Hugo era el mayor, Paco el de en medio y Luis - el mentiroso Luis - era el menor de los hermanos.

¡Ay cielos! ¡Casi les había matado! ¡A los sobrinos del amigo y colega de su abuela que tan generosamente le había abierto las puertas de su casa! Estaba tan avergonzada por haber sido engañada que estaba a un paso de fingir su propia muerte y mudarse a dónde nadie le encontrara jamás.

¿Cómo podría siquiera mirarles a la cara?

¡Y... Ah! ¡Ellos al enterarse de la verdad habían sido tan buenos! Paco... bueno el que Rosita pensaba que era Paco - era difícil, los tres vestían igual en ese momento - le había pasado un brazo por los hombros dedicándole una sonrisa cariñosa y la había sacado del cuarto con la excusa de que tenían que resolver un asunto entre trillizos. Luego le había cerrado la puerta en la nariz y no había tardado en escuchar gritos, gruñidos y cosas romperse dentro del cuarto.

Rosita no tuvo el valor de abrir la puerta para preguntar si se encontraban bien.

Ya en el comedor, el mayordomo un delgado hombre llamado Bautista le observó mientras servía la cena.

Bautista: ¿Y los jóvenes?

Rosita: (frotándose un brazo con las mejillas rojas) Ellos... eh... dijeron que tenían que resolver un asunto entre trillizos.

Bautista: (con una sonrisa diminuta) Entonces tendrá una primera cena muy tranquila señorita Vanderquack. Tome asiento.

Rosita se dejó caer en una de las sillas y comenzó a comer.

Sí... Seguro - pensó para sí misma.

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A la mañana siguiente Rosita observó entrar a los trillizos al comedor vestidos cada uno con su color respectivo, ya no recordaba cual era Hugo y cual era Paco pero estaba segura de que el de verde - que lucía como si hubiese sido arrollado por un coche - era Luis.

Bautista: Buenos días jóvenes, su tío quiere que les diga que...

Todos a coro: Salió por negocios y no puede acompañarnos ¡¡¡bieeen!!!

Rosita quedó sorprendida por la habilidad de pensar y hablar al mismo tiempo de los hermanos ¡Guau!

Bautista: Si. Y si se hubiesen dado el tiempo de bajar ayer, habrían recibido de buena manera a nuestra invitada. Ella es Rosita Vanderquack y su tío desea que sean amigables con ella. Es una jovencita muy especial.

Rosita ya estaba haciendo planes de como fingir caer por las escaleras y romperse el cuello. Necesitaba que fuese muy creíble.

Bajó la vista sonrojada deseando ser invisible.

Paco: Ya nos conocemos Bautista, va a la preparatoria y hemos sido muy amables ¿Verdad Rosita?

Rosita levantó la vista a medias y observó a quién le había hablado con temor. El chico vestido con la camiseta celeste le guiñó un ojo y le dedicó una sonrisa risueña.

¡Oooh! Los tres eran tan buenos mintiendo que hasta sabían fingir que ella les agradaba. Ese era su final. Cuando su abuela supiese lo que había ocurrido la devolvería a casa. Rosita no podía pasar por una chica normal.

Bautista se fue.

Hugo: ¡Oye! chica espía...

Rosita: (Levantando de nuevo la cabeza hacia el de rojo) M..e Me ¿Me hablas a m-i?