Tan solo un momento
Imagina
Que es tuyo
Que están juntos
Qué él es real :(
¿Cómo sería estar con él?
Estas son historias cortas de ti y de tu personaje(hombre) de anime favorito
Subirá la temperatura
Contenido +18
Ese día lo recuerdo al detalle... una sonrisa se revela en mi serio rostro al viajar a aquel momento y me preguntó, ¿Cómo lo haría más perfecto?, aunque sé que no es necesario, ese sencillo instante no supera a nada de lo que me pasó en mi vida... porque es el inicio de todo, de este tren de emociones y experiencias que solo... las podía vivir contigo.
- ¡Con cuidado hijo! - me puse mis zapatillas y partí hacia el parque, mi madre me obligó a que de un paseo para aprovechar ese momento de luz, después de tanta lluvia por el invierno; me dirigí a jugar a los columpios - Espero no este... - al llegar, vi a un grupo de niños allí, los reconocí al acortar la distancia, eran mis compañeros de escuela.
- Miren quién llegó - Koda se detuvo - ¡Es el "rarito"! - me señaló y todos comenzaron a burlarse de mí.
- ¿Quieres jugar en los columpios acaso? - asentí y estos se adueñaron de cada uno - ¡Pues llegamos primero, así que vete a otro lado! - me empujó este provocando que cayese.
- Oye Koda ten cuidado, no vaya a "lavarte el cerebro" - le dijo uno de sus compañeros.
- Ah cierto - me levanté del suelo - Aparte de ser raro, eres peligroso - espetó - Hazte a un lado, no queremos que nos vean contigo - di la vuelta para marcharme de ese lado del parque,
- Es mejor quedarse aquí - me dije y entretuve en los toboganes así como en los pasamanos, suena aburrido, sobre todo si juegas solo, pero mi madre me decía: "es mejor perder el tiempo al aire libre que en casa", así que no podía volver tan rápido, tuve que quedarme a jugar allá... solo - Ya pasó mucho tiempo, será mejor volver a casa - pude notar que el cielo se ponía gris de nuevo, por lo que iba a regresar, cuando escucho sollozar a alguien.
- Mami... papi... - los susurros provenían de ese escondite anaranjado al fondo del parque - Mami... - ignorar eso era una opción, pero...
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- ¿Quién será? - me acerqué de repente - ¿Qué haces aquí? - pregunté al ver a una niña sentada allí.
- ¡Ahh! - gritó - Yo... ahm... - se arrinconó hasta la esquina - no me dirigió la palabra, estaba a punto de girarme y volver a casa, cuando la miré de reojo y pude notar sus ojos llorosos y un poco rojos.
- Bueno... - susurré en voz baja - ¿Te has perdido? - asintió.
- Tú... ¿sabes dónde están mamá y papá? - preguntó.
- No, no conozco a tus padres - ella volvió a dejar caer un par de lágrimas.
- Mami... papi... - sollozó una vez más, he de admitir que sentí algo de lástima, estaba temblando y sobre todo... estaba sola.
- Si quieres puedo ayudarte a encontrar a tus papás - le ofrecí, no lo pensé mucho, sabía que tenía que ayudarla.
- ¿En serio lo harás? - asentí - ¡Gracias! - se puso de pie.
