Corrupción (En Corrección)

58: Alianza (Parte 6)

El hermano menor ingresó de inmediato a la casa llamando a gritos a su hermano mayor, quien al poco tiempo salió a su encuentro pues temía que hiciese alguna estupidez considerando que justo en esa casa se encontraba su prometido.

Toni se acercó rápidamente a Carlo con la intención de sacarlo de ahí, no obstante, ya era tarde Carlo había visto a Gustabo por lo que sin dudar sacó su arma y apuntó en su dirección, Emilio de inmediato sacó también su propia arma y apuntó a Carlo.

- A ver jotito ¡Baja el puto arma! - exclamó el moreno con una expresión de enojo

- ¿Tu quien coño eres? - cuestionó Carlo al mirarle de reojo

- Es el acompañante del señor Gustabo - explicó José - Carlo baja el arma

- José tu deberías apoyarme, Toni no puede casarse con un completo desconocido

- Eso lo sé, pero es su decisión Carlo

- Carlo por favor baja la jodida arma - pidió el hermano mayor

- ¿Por qué? ¿Por qué tienes que sacrificarte por todos los demás?

- Carlo ya hablamos de esto... De verdad solo baja el arma

- No, ese hijo de puta se va a morir hoy mismo

- El que se va a morir es otro, hijo de la verga - pronunció Emilio al acariciar suavemente el gatillo

- Bueno no me iré sin antes haberme llevado a ese imbécil al infierno - Carlo centró su vista en aquel rubio que se encontraba aún sentado en el sofá

Gustabo no mostraba expresión alguna, pues pensaba que no valía la pena exaltarse por un desconocido que venía a interrumpir sus planes, por lo cual respiró profundamente y se animó a dialogar un poco.

- Disculpe caballero, pero no entiendo las repentinas amenazas hacia mi persona

- ¡No hace falta que lo entiendas! ¡Solo necesito que mueras para que Toni sea libre!

- Ya veo... Usted debe ser Carlo por lo que escucho, no pensé que le conocería de esta manera

- Pues es el momento de la despedida - Carlo procedió a caminar acercándose rápidamente a Gustabo

- Yo que tu no haría eso, es una falta de respeto hacia tu cuñado

- Que hijo de perra - Carlo podía sentir hervir la sangre ante la mirada de burla del rubio aquel, podía notar claramente como no estaba siendo tomado en serio

- Baja el arma niño o habrá problemas

- Hey niño, haz caso a tus mayores o vas a perder algo más que tu vida - habló Emilio al sujetar a Toni manteniendo el arma contra su cabeza

Gustabo sonrió internamente ante ello, sabía que podía confiar en su fiel compañero ante todo, José sacó su navaja pero desde luego no podía acercarse ante él peligro de lo que le sucediese a su jefe, Carlo volteó a ver a su hermano siendo rehén del hombre de coleta, lo cual le hizo enojar aún más.

- ¿Se puede saber que cojones crees que estás haciendo? - cuestionó Carlo al mirar al hombre de coleta

- Si usted no deja de apuntar a mi jefe, entonces haré lo mismo con su hermano

- Oye... Basta - pidió Toni quien no entendía el ritmo de las cosas

- Más le vale no hacerle nada a Toni - habló José

- Suéltalo ahora, no pongas tus sucias manos sobre mi hermano

- Escucha Carlo, no quiero hacerle nada a Toni, por favor tan solo deja de hacer estupideces y comportarte como alguien de tu calibre - declaró Gustabo al levantarse del sofá