Corrupción (En Corrección)

103: Sombra (Parte 14)

Toni estaba nervioso, quería desaparecer en ese instante, la mirada de disgusto de Greco iba dirigida hacia él en su totalidad.

— ¿No piensas decir nada?

— ¿Qué quieres que diga? — respondió en un tono altanero, si bien sabía que tenía todas las de perder, aún así no estaba dispuesto a mostrar el miedo que sentía

— No me hables en ese tono — el castaño sujetó del brazo al rubio

— Suéltame, no quiero escucharte — el rubio intentó soltarse del agarre del hombre pero le fue imposible

— ¡Pues vas a tener que hacerlo! Tú y yo vamos a hablar, pero no quiero que sea aquí en comisaría, antes de cualquier cosa quiero que primero hables conmigo a solas

El hombre le retiró las llaves del auto al menor, acto seguido le hizo entrar al vehículo para posteriormente ingresar el y tomar el volante, emprendiendo así el viaje. Toni permaneció en silencio, su mente trataba de buscar alguna posible excusa, cualquier cosa que sirviera para salir libre del tema. Carlo no perdonaría el enterarse de que estuvo saliendo con un policía y mucho menos que este sea la causa de la caída de su organización.

Después de unos 10 minutos, finalmente llegaron a un pequeño estacionamiento, un lugar bastante alejado y solitario, justamente el sitio adecuado para hablar sin peligro alguno de ser escuchados.

— Tienes una oportunidad Toni, solamente dime ¿Qué cojones estás ocultando?

— No oculto nada Greco — el rubio suspiró con pesadez

— Tu hermano estaba portando drogas Toni y no en una cantidad pequeña precisamente... ¿Sabes qué otra cosa también me di cuenta?

— No me interesa

— No, si que te incumbe — el castaño sujetó el rostro de su pareja para acaparar su atención — esas drogas son las mismas que ingeriste aquel día... Esas qué casi te matan

— No sé de qué hablas

— ¡No tienes que negarlo! Sé lo que vi y si tu hermano sale libre será gracias a Salinas

Toni desvío la mirada, con cada palabra que salía de la boca del castaño tan sólo le hacía pensar en que librarse de esa sería muy complicado.

— Mírame cuando te hablo Toni... Yo acepté creerte luego de aquella vez, decidí confiar en tus palabras... Pero ¿Tienes idea de lo que sentí al verte así? El pensar que podía perderte me afectó de gran manera... Tú te volviste una parte importante en mi vida, eres alguien a quien amo, alguien con quien quiero estar

— Tus palabras... Carecen de importancia para mí — declaró en un intento de mantenerse digno

— ¿En verdad pretendes molestarte conmigo? — el hombre rió con cierta ironía — creo que en este momento soy yo quien debe estar furioso... No puedo creer que mi novio no haya tenido la confianza de decirme algo tan grave

— No tengo nada de que hablar, no me vas a sacar nada con tus mentiras

— No son mentiras Toni, mis sentimientos por ti son reales... Pero aún así no pienso pasar por alto el hecho de que tu hermano trafique con drogas y mucho menos que te haya puesto en peligro al dártelas a ti

— ¿Dármelas? ¿Qué quieres decir? — el rubio levantó la mirada hacia el castaño

— Eso mismo Toni, lo que es evidente, tu hermano anda metido en las drogas y por eso mismo él fue quien te las dio ese día... Él es ese hombre cuya identidad te negaste a darme ¿Cierto?

El rubio se mostró confundido, aunque después de un par de segundos su mente cayó en cuenta de lo que realmente el hombre aquel insinuaba, Greco confundía la situación entre lo que había sucedido con Carlo y entre la historia qué inventó para librarse del interrogatorio policial después de su sobredosis. Tal parecía que Greco pensaba que el hombre ficticio qué supuestamente le había dado las drogas, se trataba de Carlo.