Mi café favorito es el de tus ojos ☕ (Jace Norman y Tú)

Capítulo 49

Narra Harper

Ya había pasado una semana, si, una semana de ansiedad, insomnio, demasiados cafés por ello, dos finales en la universidad desaprobados y una actuación de Óscar hacia Conner.

Aún no le había dicho nada y eso me destruía aún más. Creí perder a dos personas importantes en mi vida por ocultar algo y, al parecer, no aprendí la lección, porque no planeaba decirle nada hasta tener una decisión tomada al cien porciento. Lo estaba evitando lo más que podía, pero no era para nada fácil, y cuando lo veía, tenía que fingir.

Con Jace las cosas... estaban. No estaban mal por supuesto, pero "bien" tampoco era la palabra. Había demasiada incomodidad ¿Y cómo no? ¿Cómo reaccionarías si estás relacionada con una persona que está dispuesta a irse y dejarte, y peor, cuando eso es una opción?

Odiaba esa tensión, odiaba ese ambiente molesto. Porque la palabra que usaría en realidad para describir nuestra situación era: triste. Él estaba así, yo también sumado a confundida, y eso es lo que formaba la incomodidad.

Era sábado y recién me había levantado. Fui hasta la cocina donde ya estaba mi abuelo con su crusigrama. Solo fui al refrigerador, agarré jugo de naranja y tomé del pico.

-Todos tomamos de ahí- comentó él.

-Eso me incluye- contesté y él soltó una risa.

-"Que existe, ocurre o se usa en el momento mismo en que se habla".

-Presente.

Anotó la palabra. Yo volví a tomar un sorbo del jugo y me senté frente a él.

-¿Por qué piensas tanto en el futuro?- soltó mi abuelo de repente dejando el crusigrama y bolígrafo en la mesa.

-¿Eh?- pregunté confundida.

-No me mal entiendas, hay que organizarse en la vida, pero estás demasiado preocupada. Solo tienes 19, casi 20.

Claramente, me di cuenta que hablaba de mi situación, de mi decisión.

-Obvio que me preocupa- contesté- Me preocupa tomar la decisión equivocada. Si me quedo, quizás pierda una gran oportunidad. Y si me voy, quizás...- odié solo pensarlo- ...quizás pierda a Jace para siempre.

-Si tienes tanto miedo, ¿por qué en vez de deprimirse por ello ahora no se disfrutan? Lo que tenga que pasar, pasará después- reflexionó- Vive en el presente, estrellita.

☕☕☕

-Hola- dije ni bien Jace abrió la puerta.

-Hola- contestó- Pasa.

Se corrió para que lo hiciera y me metí a la casa. Escuché la puerta cerrarse y fui al punto.

-Odio lo que está pasando entre nosotros.

Él se sorprendió. Creo que entendió mal y bien al mismo tiempo.

-Me refiero a que, puedes intentar ocultar todo lo que quieras que no está muriéndote porque no sabes que decisión voy a tomar, pero lo noto- expliqué- Lo noto, porque estoy igual y eso nos está afectando. Me siento extremadamente incómoda y no sabes cuanto lo detesto.

-Tienes razón- admitió con dificultad- ¿Qué sugieres que hagamos?- lo preguntó con demasiado miedo de la respuesta.

-Quiero que vivamos en el presente- respondí y él cambió la expresión. Se esperaba algo mucho peor- Claro que la situación estará, pero, ¿podemos... simplemente... estar... ahora?

Él sonrió y eso me contagió a mi también.

-Me encantaría- respondió y me abrazó.

Yo lo separé inmediatamente y lo acerqué, esta vez, para besarlo. Es lindo estar en el presente, porque ahí estaba, en el beso, en su beso, no pensando en que no quería que terminara, ni en que antes era lo que quería.

Solo ahí.