Capítulo 29

258 36 24
                                    

Envolví las piernas con mis brazos mientras mis oídos zumbaban al compás en que mis pensamientos viajaban de un lugar a otro, flores, verano, mamá, sonrisas, papá, ojos azules, Anastasia, autos, dolor, parpadee concentrándome, dolor.

¿Por qué tiene que a ver dolor? respire hondo.

Scott me había traído una pijama y ya estaba vestida, él estaba sentado frente a mí y yo estaba sentada en la cama, no había dicho nada y le agradecía por eso, no quería hablar, por suerte me había calmado después de quedarme dormida, aunque no fue por mucho tiempo, la agonía me envolvió y desperté de golpe empapada en sudor, no podía cerrar los ojos y cuando lo hacía hay estaba, otra vez, sus manos, su olor, su vos, hay estaba haciéndome daño, no quería, no otra vez.

Lo mire, sus ojos no me habían abandonado desde que se sentó en la silla de mi escritorio, con él nada era incomodo pero sabía que si no hablaba pronto no se iría y no dejaría de mirarme como lo estaba haciendo, aparte la mirada y la fije en el balcón, aún era de noche pero se veían no muy claro algunos rayos del sol que se avecinaba, el celular volvió a sonar y sabía que era Emir, no había respondido sus llamadas ni sus mensajes desde que llegue a casa y de eso ya hacía varias horas, Scott había hablado con Mia cuando también comenzó a llamarme sin descanso, le explico no muy profundo la situación y ella entendió, sabía que no había nadie mejor que él para escucharme y estar conmigo, no había alguien más en el que confiara tanto como él sobre todo esto, me jode el hecho de pensar que todos saben por todo lo que he pasado, pero no quiero que Emir lo sepa, él no y hare lo posible por que se quede así.

-Tú novio me matara -lo miré un poco aturdida -Cuando respondí su llamada mientras dormías no le cayó muy bien la noticia de que estuvieras a solas conmigo.

-¿Mi novio?-pregunte como estúpida.

-Tú jefe... ¿Cómo se llamaba?

-Emir -dije, él asintió -No es mi novio.

-Creí que si.

-Queremos conocernos primero.

-Creo que se conocen lo suficiente.

Sonreí.

-Pues te llamo, llamo y no sabía que hacer.

-¿Por qué le contestaste?

-Buena pregunta -se lleva una mano a la barbilla -Puede ser porque envió un mensaje diciendo que vendría si no le respondías.

-Joder Scott.

-No tuve otra opción pecas, te tenia desnuda en la cama y completamente inconsciente, créeme, no habría nada que existiera para explicar la situación.

Esboce una sonrisa.

-¿Te lo imaginas?

-Si es él hombre que he visto en fotos apostaría que no quedaría nada de mí.

-No exageres.

-Es la verdad.

-No te haría daño.

-Lo dudo.

-No lo permitiría.

-Estabas inconsciente y desnuda... Dudo que hayas podido hacer algo.

Sonreí.

Se levantó y camino hasta mí, se subió a la cama y se sentó a mi lado en la misma posición en la que estaba yo, recosté mi cabeza sobre su hombro, mi corazón estaba tranquilo y mis pensamientos igual pero aun así tenia inquietud, mi cuerpo no se podía calmar aun.

-Tengo miedo -confesé.

-Todos lo tenemos Madison, es normal.

-No el mío, paso algo muy extraño en el viaje Scott, algo que aún no sé cómo explicar.

CICATRICESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora