Cerré la puerta de un portazo y me apoyé en ella, limpié una lágrima silenciosa que caía por mi mejilla justo antes de que Bruno y Mía aparecieran riendo frente a mi. Ellos se detuvieron y me vieron con confusión.
—Charlotte ¿Que te sucedió?— preguntó Bruno— ¿No estabas con Nate?
—No pasa nada— le di una sonrisa y caminé a paso rápido hasta mi habitación, sentí pasos rápidos detrás de mi— No me sigas, Mia.
—Sabes que lo haré de todas formas— dijo cuando llegamos a mi habitación— ¿Pasó algo con Nate?
Claro qué pasó algo, todo se arruinó, se terminó.
—Pasa que me dijo que yo le gustaba enserio.
Ella aplaudió emocionada.
—¡Lo sabía!— Al ver mi expresión frunció el ceño— No te ves feliz... ¿Porqué?
—¡Porque él no debía quererme! ¡Sólo era la diversión del momento y ya!
Mia parecía muy confundida, luego, cuando lo entendió apretó los puños.
—Maldita sea Charlotte ¿Aún piensas en él?
—Jamás he dejado de pensar en él.
Mentira. Deja de mentirte así.
—Falso. Te conozco de toda mi vida, jamás tomaste enserio a nadie y llevas meses saliendo con Samuels, y no digas que era solo sexo porque no lo era, a lo mejor tú no lo notabas pero yo te vi llegar con una sonrisa cada vez después de que lo veías— me regañó.
—Entiéndeme Mia. También fui así con Kian, me quiso y lo lastimé, Samuels hizo lo mismo, no voy a cometer el mismo error dos veces.
—¿Lo ves como un error?— preguntó Bruno entrando a mi habitación.
—Si— dije sin rodeos.
—Deja de mentirte así, ni tú te crees eso— él negó con la cabeza— Solo tienes miedo, no conozco tu historia con ese tal Mason, pero se lo suficiente como para estar seguro de que no te quiere ni un poco.
—Mason es lo más real que tengo— lo defendí.
—Mason es lo más falso que tienes— corrigió Mia— Samuels es lo más real que has tenido, y espero que te des cuenta antes de que sea tarde.
—Quiero estar sola, no necesito sermones ahora, por favor— pedí.
Ellos me dieron una última mirada de preocupación y salieron de mi habitación. Yo cerré la puerta y rompí en llanto.
Él no es tú...
¿Porque dije esa estupidez? Estaba contándole sobre Mason, le hablaba sobre el amor de mi vida pero solo podía sentirlo a él. Esto no puede estar pasándome, no podía imaginarlo, apenas cerré los ojos seguía sabiendo que era Nate, lo sentía a él, estaba imaginándolo a él. Estaba siendo tierno y suave como yo le decía, pero yo no quería que fuera así, porque él no es así.
Mason es dulce y romántico, es lo seguro y lo estable.
Nate es lo rápido y lo intenso, es lo desenfrenado y lo emocionante.
Y me dio miedo estas simples palabras suyas me asustaron.
Tú me gustas, me gustas de verdad...
Su confesión fue como un balde de agua fría para mi, porque todo ese momento de esta mañana me abrió los ojos, me gustaba como se sentía que me besara de esa forma, tan lento... él jamás me había besado así, me asusté porque comenzó a sentirse real, porque me estaba gustando más de la cuenta, porque todo eso me gustaba... pero solo si era Nate quien lo hacía.
Con Kian no me pasó esto, yo no llegué a verlo así, fue una distracción y un apoyo, un pilar fundamental que tengo hasta el día de hoy. Pero noté que Nate ya no está siendo una distracción...
Me senté en la silla de mi escritorio y abrí mi laptop, con los ojos llenos de lagrimas comencé a escribir, me siento mal, me siento perdida. Y todo es por su culpa.
26 de junio:
Perdóname Mason.
No creí que llegaría el momento en el que te diría algo así, siento culpa, siento tristeza y a la vez miedo.
Estoy olvidándote... ¡maldita sea Mason ya no estoy pensando en ti! Trato de pensar en que estoy confundida aunque sé que tengo las cosas muy claras en mi cabeza, intento ignorarlas, eso no puede terminar bien de ninguna manera.
Te lastimé a ti, se supone que estoy esperando por ti, pero en algún punto del camino te dejé atrás y no me di cuenta, porque seguí caminando con alguien que no eras tú.
¿Pero aún puedo remediarlo, verdad? Si me mantengo alejada de él no puedo dañarlo más de lo que ya hice, es eso, él debe odiarme otra vez. Y así yo también puedo seguir con mi vida... sin ninguna distracción.Es eso, solo debo alejarme y todo estará bien, ya sé lo que debo hacer, debí hacerlo hace mucho tiempo y ya no puedo esperar más. Es mi única opción, si encuentro a Mason voy a recuperar el rumbo de mi vida y Nate solo pasará a ser una etapa más que tuve que superar. Mason me hará reflexionar, me hará entrar en razón, solo debo verlo, después de todo mis sentimientos por él fueron más fuertes que todo, porque no se basaba en algo físico sino en un lazo emocional irrompible.
Tomé una ducha corta y me cambié de ropa, bajé las escaleras a paso rápido y me encontré con que los chicos estaban en la sala, ellos me miraron con atención. Ellos pensarán que estoy loca, pero es necesario para mi. Tengo que hacer esto.
—¿Donde vas?— preguntó Bruno.
—Solo iré a tomar aire— dije caminando hasta la caja de las llaves y busqué alguna.
—Estas alterada, confundida. No es bueno que salgas así. Puedes hablar con nosotros Charlotte, no te guardes lo que sea que estas sintiendo— dijo Mia llegando frente a mi.
—Estoy bien, enserio. Yo pensé mucho, tal vez tienes razón— ella sonrió— Pero no dejaré que eso suceda, y ya se lo que debo hacer para evitarlo.
—¿Que es lo que harás? ¿Ir a algún bar? No puedes engañar a tu corazón con alcohol o cualquier otra cosa, ese sentimiento seguirá ahí aunque no lo quieras.
—No iré a beber.
—¿Entonces qué es lo que harás?— preguntó Bruno con confusión.
—Lo que debí hacer hace muchos años, encontraré a Mason...
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Todo comenzó con su Mirada | ✔️
Romance¿Cómo podrían describir a Charlotte Black? Famosa, Sorprendente, Interesante, Guapa, Talentosa. Lo sé, tiene demasiadas cualidades, ¿Pero les cuento una cosa? Existe alguien que no quiere verlas... Charlotte Black es una estrella en ascenso, la her...