Tuve la idea más genial y al mismo tiempo más obvia del mundo. Mason siempre venía a escribirme cosas, no puede ser en la mañana así que debe ser en la noche, los guardias solo vienen día por medio, días en los que yo recibía mensajes, por lo que hoy debería venir, y aquí estaré yo... esperándolo.
Todo aqui es muy oscuro y silencioso, para mi buena suerte hoy no me encontré con gemidos desagradables. Recorrí la escuela para hacer tiempo, me gustaría que todo fuera tan tranquilo como es ahora.
Me puse alerta al oír ruidos provenientes del techo, ¿Será Mason? Prácticamente corrí hacia la escalera que lleva allá. Abrí la puerta y el aire frío pegó de golpe.
No, no es Mason. Había olvidado que él viene aquí. Hubiera huido de no ser porque volteó a verme.
—¿Viniste a disculparte?— preguntó mientras se acomodaba en su asiento y tomaba una cerveza.
—No. Ni siquiera sabía que estabas tú aquí, Samuels.
Me acerqué algo dudosa, miré a mi alrededor ¿Esto siempre ha estado aquí? Jamás había subido, él tiene una pequeña lámpara y algunos cojines para poder sentarse, le quité uno y me senté a su lado.
—¿Entonces qué haces aquí?
—Busco a Mason— dije directamente.
Él no dijo nada, simplemente dejó de mirarme y siguió tomando de su cerveza. Se que le hice algo horrible ayer pero quiero que me odie, quiero que me vea como una mala persona y que se aleje de mi. Solo estando lejos puedo garantizar que no le haré daño.
—¿Que haces tú aquí? Parece que tienes todo lo que podrías necesitar— vi sus cosas— ¿Eso es un saco de dormir?
—Te lo diría pero realmente no te importa lo que yo haga ¿Verdad?
—No me importa— Él rió secamente— Pero quiero saberlo.
Destapó otra cerveza y me la dio, yo bebí un largo trago, lo necesito, estar a solas con él jamás había sido tan difícil.
—En mi casa no hay nada malo ¿Sabes? Mis padres son geniales y tengo todas las comodidades que podría necesitar. Pero siempre siento como si no perteneciera a nada de esto. Hace algunos años tenía muchos amigos, demasiados, pero no eran de verdad, jamás lo eran. Podía ser popular pero yo quería que me quisieran, y eso no me hacía feliz.
—¿Entonces te alejaste de todo eso?— pregunté, algo asombrada de que estuviera contándome algo tan... suyo.
—Si. En algún punto las personas comenzaron a fastidiarme, siempre eran tan falsos que comencé a ver la vida de otra manera. Me volví frío y distante, cuando no eres nadie puedes darte cuenta de las personas que realmente valen la pena, porque se acercan a ti de buena fe, y no por interés. Así conocí a Gaby, ella decía que todos esos chicos populares le caían mal y que podíamos ser un equipo para criticar su ropa— yo no pude evitar reír— ella fue la primera y la única amiga que tuve. Y es real. Así que con eso me basta.
Yo vivo rodeada de personas falsas pero eso es lo hago, mi vida se basa en estar en el ojo publico y convivir con todos.
—Me gusta venir aquí en la noche porque es tranquilo, es silencioso y calma el ruido constante que siento en mi cabeza. Jamás me he expresado demasiado con lo que siento o con lo que pienso porque me hace sentir vulnerable. Siempre es más seguro estar en las sombras, en la oscuridad.
—¿Porque?
—Porque así nadie puede lastimarte— me miró fijamente, un golpe de culpabilidad me dio en el pecho— Cometí el error de salir de las sombras y enfrentarme a la luz más brillante que pude encontrar— me señaló— Pero aunque no lo creas no me arrepiento de nada, porque aún no he perdido la guerra.
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Todo comenzó con su Mirada | ✔️
Romance¿Cómo podrían describir a Charlotte Black? Famosa, Sorprendente, Interesante, Guapa, Talentosa. Lo sé, tiene demasiadas cualidades, ¿Pero les cuento una cosa? Existe alguien que no quiere verlas... Charlotte Black es una estrella en ascenso, la her...