43- Cronicas de un corazón roto

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Nate Samuels

Hace un año y medio...

No podía seguir viéndola. Me fui de ahí lo más rápido posible. Charlotte estaba con alguien más, y no pude resistirlo. Acabo de llegar y ver eso... fue como si hubiera clavado un cuchillo en mi corazón. Es la chica a la que he amado toda mi vida, mi primer y único amor. Volví con la ilusión de encontrarla y poder ser felices juntos. Poder charlar, salir juntos a citas o lo que fuese. Y darle la sorpresa de que estudiaría en su misma escuela...

¿Pero que conseguí? Un corazón roto.

Me estacioné fuera de la que ahora es casa de Josh. Mi mejor amigo. Él vivía en Canadá, pero se mudó aquí hace un par de meses, estaba muy feliz porque volveríamos a encontrarnos, pero ciertamente su expresión al verme una vez que golpeé la puerta mostraba que no planeaba verme así. Destruido.

—Nate... ¿Que pasó? Ven, entra— se hizo a un lado y me invitó dentro de su casa.

No se cuanto tiempo estuve sentado mirando el suelo, solo se que tenía un dolor punzante en el pecho que cada vez se iba haciendo más grande, a medida que le contaba lo que había sucedido. Josh sabe absolutamente toda mi loca historia, como mentí sobre mi nombre, como ha avanzado nuestra historia, mis horas frente a la computadora esperando su correo electrónico del día, y lo enamorado que estoy de ella. Así que entendió al instante lo mal que me siento.

—Mierda Nate, no se que decir. Osea, no está mal que ella haga su vida ¿sabes? Lo que sí está mal es que esté hablando con alguien por años, diciéndole que lo ama, y que en verdad esté con otra persona. ¿Quien hace eso?

—No estas ayudando, Josh— dije mientras frotaba mis ojos.

—Lo siento— me dio una sonrisa culpable— Tal vez sea bueno que hables con ella. Puede que sea un error...

—Yo la vi, Josh. Estaba besándose con un chico.

—Bueno, pero tampoco eres un santo. ¿O no recuerdas aquella fiesta en la que te acostaste con aquella rubia?

Buen punto.

—Estaba borracho, fue un error. Y sabes mejor que nadie lo mucho que me arrepentí el día siguiente, y los días que le siguieron. Hasta el día de hoy pienso en lo idiota que fui en aquella fiesta. Porque yo siempre he querido que Charlotte fuera mi todo— me levanté de mi asiento— Pero es diferente. Porque hace unas horas Charlotte acababa de decirme que me amaba. ¿Qué tipo de amor es ese?

—Ven, siéntate aquí— me llamó, yo obedecí— Dime que sientes de verdad, sin hacerte el duro. Se Mason, el chico de blando y frágil corazón.

—¿Mason? Me siento traicionado, porque en mi cabeza ella era perfecta. La idealicé, y no debí. Crei que era posible que ella no se fijara en nadie más que en Mason. Pero rompió mi corazón— mi voz se quebró— yo le llevaba flores y quería sorprenderla. Porque mi corazón siempre ha sido suyo, quería demostrárselo. Y si, he cometido errores, pero lo he hablado con ella, siempre. Porque siento que debo compartirle eso, que debo ser fiel a mi corazón....¡Pero ella no lo es! ¡Charlotte simplemente miente! Es aquella chica encantadoramente adorable por los correos, pero en realidad es... es como todas las demás. Y ya no confío en ella. Ya no.

Inspire hondo.

—Y odio eso porque a pesar de todo, sigo creyendo que ella es la estrella más brillante, es mi cielo, mi mundo entero. ¿Y yo para ella que soy? Solo una etapa que obviamente siente pena de cerrar.

—Eres un romántico aún con el corazón roto. Pero Nate, no te pierdas. Si de verdad estás dolido aléjate de ella, por tu bienestar, tal vez te sirvió para darte cuenta de que no vale la pena. Que solo fue una ilusión por un inocente amor infantil. Y que ahora te sirvió para dar vuelta la pagina y comenzar una nueva vida— me animó— ella no sabe quien eres. Ni yo te reconocería. Tienes todo para ser Nate Samuels con tranquilidad. Dejando esa culpa que ella te hace sentir, y puedes curar ese corazón roto de una vez.

No quiero eso. Quizá soy masoquista, pero no puedo alejarme de ella. Tal vez es porque siento la necesidad de encontrarle una explicación razonable a algo que no lo tiene. Porque de verdad quiero entender... quiero poder borrar todo esto y ser feliz, tal como siempre lo he soñado. Con ella. Porque Charlotte es la única que me ha mantenido fuerte, en cada problema ella estuvo allí para darme apoyo. Y yo la sentía conmigo, porque hacía cualquier cosa para levantarme el animo. A pesar de que yo jamás quise enviarle fotos de mi, ella si lo hacía. Incluso grababa videos en los que me enviaba muchos besos o me decía muchas cosas bonitas. Y se sentían reales, eran tan preciados para mi que los veía sin parar, solo para verla y escuchar su voz.

Tengo el corazón roto, si. Pero seré Nate. Y Nate Samuels no es una persona que se rinda. Ya no soy débil, como demuestro ser detrás de una pantalla, siendo el dulce y sensible Mason. Es un lado de mi que solo ella ha podido conocer, y voy a luchar por ello. Todos estos años no pueden haber sido en vano. Quiero creer que al menos le importo. Así que si ya estoy aquí no puedo perder nada más, ella es lo único que creía tener, y al parecer nunca la tuve conmigo. Prefiero mantener su recuerdo, aferrarme a él para darme la fuerza de enfrentarme de golpe a la realidad. Para conocer a esta Charlotte, y ver qué tan diferente es, cuanto ha cambiado y que es lo que está sucediendo.

No voy a rendirme, Charlotte. Ambos hemos cambiado. Y quiero creer que tú sigues amándome tanto como solías decir. Quiero escucharlo de ti. Quiero mirarte a los ojos después de tantos años y decirte todo lo que siento por ti. Porque tu amor por mi no pudo haber desaparecido, me niego a creer eso.

Todo comenzó con su Mirada | ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora