Me gusta Nate. Maldita sea, siempre ha sido Nate.
Y justo ahora, estando en la escuela, no puedo evitar el impulso de querer saber dónde está, solo para poder verlo un momento. Jamás había sentido esa necesidad... jamás me había sentido tan mal por tomar una decisión.
Pero juro que traté de evitarlo. Sabía que lo lastimaría y eso hice. Pero lo lastimé al alejarme, no por quedarme en su vida. Lo abandoné, y no me voy a perdonar eso jamás.
¿Pero de eso a ser villana? ¿Villana yo? Claro que no.
Y la verdad es que no me gusta que me vea así, porque no soy yo la que está jugando. Se que le hice daño, pero todo este tiempo le hice caso. Y él tenía razón, ese Mason... no es quien solía gustarme entonces, me aferré a un vago recuerdo, tal vez mi mente me traicionó, habían veces en las que realmente no lo recordaba con claridad y reemplacé esos recuerdos con cosas que yo quise que realmente ocurrieran. Yo he cambiado mucho, y Mason también, no es malo, al contrario, me hizo darme cuenta de muchas cosas, de que ya no lo necesito porque desde hace un tiempo comencé a necesitar a alguien más...
Ayer cuando lo vi con aquel niño pude ver ese lado amable de Samuels, un lado más humano, más adorable. Es como si hubiera entendido lo que ese niño sentía. Me había conmovido el hecho de darme cuenta de que jamás había dejado de verlo a él, mientras pasaba las tardes de paseo con Mason siempre pensaba en lo que él estaría haciendo en ese momento, pensaba en qué tal vez estaría solo en su habitación leyendo un libro o tal vez tocando la guitarra. Y por las noches soñaba que estábamos juntos, jamás me había pasado eso, no que yo recuerde. Por lo general no suelo despertar con la sensación de que algo me falta, pero ahora si. Incluso el otro día me pasó, cuando me quedé dormida en casa de Mason...
*
Mason reía con la película que veíamos mientras comía palomitas, yo acomodé mi cabeza sobre su hombro y cerré los ojos.
Estábamos en su habitación, habíamos venido aquí luego de dar un paseo por el parque, Mason es realmente una buena compañía, pero la película es aburrida.
Nate...
Vi a Nate, estaba sentada en el marco de mi ventana mientras lo veía entrar a mi habitación, traía el cabello mojado, el torso desnudo, se acercó a mi y dejó un suave beso en mis labios. Sonrei entre el beso, se sentía muy bien.
—Charlotte— susurró en mi oído.
Abrí mis ojos, mis párpados se sentían pesados, estaba otra vez en la habitación de Mason, estaba oscuro y la televisión seguía encendida, pero no era él quien estaba a mi lado, era Samuels. Me incorporé un poco y miré hacia todos lados ¿Y Mason?
—Me halagas Charlotte, el hecho de que estés aquí con él pero que yo esté en tu imaginación— dijo tomando mi mentón— Es emocionante.
—No sé porqué sueño contigo...
—Si lo sabes— dijo dándome un beso en la mejilla— Porque tal vez puedes engañar a los demás pero no a ti misma, y tú estás soñando conmigo porque te encantaría que yo fuera quien esté aquí, por cierto, que fea habitación tiene— dijo mirando a nuestro alrededor.
Yo lo miré con atención, mi imaginación está jugándome en contra, esa ropa que trae puesta es la que Mason trae realmente, y no le pega nada. Pero si me gusta mucho que su cabello esté alborotado.
Le di un beso, uno que lo llevó a intensificar el siguiente, terminé volviendo a recostarme en la cama con él sobre mi, con sus manos descendiendo por mi cintura y con mis manos tratando de tirar de su camiseta. Solo él puede hacerme sentir así... y no quiero despertar, no quiero que esto acabe.
—Deberías despertar ya, así te das cuenta antes de lo equivocada que estás— dijo acariciando mi mejilla.
Yo cerré mis ojos antes la sensación, él me relaja, me hace sentir tranquila. Al abrirlos me di cuenta de que ya era de día, miré a mi lado y vi a Mason completamente dormido.
Suspiré rendida, fue un maldito sueño.
*
Así fue, mi maldita imaginación.
Además, en la escuela, solo tengo ganas de acercarme, pero dije que no lo haría. Lastimo personas que quiero, quería que él fuera la excepción, pero soy egoísta, siempre lo he sido, y ahora, si serlo significa estar cerca de él pues lo haré con gusto.
Solo debía comprobarlo, Mason me había ayudado, tal vez sin darse cuenta, de que cada vez me daba más fuerza para olvidar mis miedos y hacer lo que realmente quiero hacer. Me ayudará una vez más.
Aproveché que él fue por mi al instituto.
—Necesito un último favor, rubio— dije parando de caminar.
Estábamos en medio de la acera, caminábamos hasta su casa, él se detuvo frente a mi, mirándome con confusión.
—¿Que pasa?
—¿Somos amigos verdad?— Él asintió— lo intenté enserio. Pero me rindo, no puedo engañarme más, y debo confesar que Nate jamás a sido solo una aventura para mi, es mucho más que eso, incluso más de lo que me gustaría, es... es todo lo que podría querer. El solo llegó a mi vida y cambió todo, derribó aquella barrera que creé cuando tú te fuiste, y ahora se que quiero arriesgarme a ser feliz... con él.
Mason sonrió.
—Lo sé. Y ambos sabemos que ya no somos esos niños que morían de amor por el otro. Ahora somos dos chicos que se quieren como amigos y que harían cualquier cosa por ver al otro feliz, espero haberte ayudado, Charli— dijo con una sonrisa.
Yo me acerqué rápidamente y le di un beso, un beso en que no sentí nada, solo un simple contacto, eso es nuevo, él me miró confundido.
—¿Charlotte? ¿Que haces, loca?— preguntó pasmado, poniendo su mano sobre sus labios.
Yo lo abracé felizmente. No sentí absolutamente nada, y eso ya lo sabía, pero tenía que asegurarme.
—Gracias, no sentí nada.
—Eso me hace sentir súper bien— dijo sarcásticamente.
—Es algo bueno, aunque ya sabía que no sentía nada por ti.
Él soltó una carcajada y luego me abrazó.
—Gracias por ser mi amiga, Charli.
—Gracias por darme una segunda oportunidad para conocerte, Mason. Y deja de decirme Charli si quieres sobrevivir— dije inocentemente.
—Ignoraré tu amenaza porque el momento es lindo— dijo separándose un poco de mi— Ve por él.
—¿Ahora?— pregunté asombrada— No. No puedo, aún estoy procesándolo, no estoy lista para ser honesta con lo que siento, no soy buena hablando sobre sentimientos...
—Hey— me frenó mientras apretaba mis mejillas— Pudiste abrirte conmigo, puedes decírselo a él también.
—Es diferente, no eres él. Samuels es tan... serio y fastidioso. Me pone... nerviosa— admití.
—Vamos, si puedes. Confío en ti.
Si puedes. Repetí esas palabras en mi cabeza todo el camino, y vaya que tuve mucho camino para pensar, jamás he hecho esto, y justo ahora que estoy frente a su puerta estoy poniendo en juego mi dignidad, y mi orgullo. Estoy jodidamente aterrada, porque querer a Mason era algo seguro, pero arriesgarme a vivir esto que siento, da miedo, porque no se que es lo que pasará ahora. Toqué la puerta rápidamente, mi corazón comenzó a latir muy rápido en el momento en el que oí su voz desde el otro lado de la puerta.
Él apareció con el ceño fruncido, dispuesto a maldecir a cualquiera que lo haya molestado, al verme se sorprendió, pero no le di demasiado tiempo para reaccionar.
Lo besé...
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Todo comenzó con su Mirada | ✔️
Romance¿Cómo podrían describir a Charlotte Black? Famosa, Sorprendente, Interesante, Guapa, Talentosa. Lo sé, tiene demasiadas cualidades, ¿Pero les cuento una cosa? Existe alguien que no quiere verlas... Charlotte Black es una estrella en ascenso, la her...