Capitulo especial: mi ángel parte 3

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—aquí tienes— deja una bandeja frente a mí, lo acaba de traer una eriza de ojos morados por indicación del doctor.

Veo su contenido, comida de diversa clase y todo huele delicioso a pesar de que nunca los había visto antes. Siento como mi estómago se remueve al ver la comida. No lo pienso mucho y comienzo a comer, todo sabe muy bien.

—no comas muy rápido, puedes atragantarte— escucho su voz a mi lado, calmo mis ansias y asiento comiendo con mayor calma.

Mientras lo hago lo miro de vez en cuando, él se mantiene a mi lado, aunque se ocupa en el computador. Aun me cuesta creer lo que me dijo hace poco, me hace feliz y mucho, pero también me preocupa.

Durante toda mi vida los que se han acercado a mí es por algo, quieren que los complazca, quieren que sea su juguete, solo me utilizan y cuando ya no sirvo solamente me tiran. Solo soy algo que cuando se rompe tirarán.

Algo en mí me dice que no pasará con él, no es como los demás, cumplió mi deseo y esa calma que me trasmite su presencia, es como si supiera que no es malo. Y otra parte de mí me grita que soy un idiota, y que pasará todo otra vez.

—pasa algo?— parpadeo un poco

Niego rápidamente —no, nada— Me le quedé viendo sin querer

—de acuerdo— su mirada me dice que no lo convencí, pero no sigue preguntando —debo retirarme un momento, regresaré enseguida, tu come tranquilo— se levanta dejando su computador en donde estaba sentado y se retira.

Veo cómo se aleja y desaparece por la puerta. El lugar se vuelve silencioso y vacío. Sigo comiendo tratando de no pensar, él dijo que regresaría pronto, va a regresar pronto, ¿verdad?

Y si no vuelve? Y si se va? Yo no le sirvo como estoy, me dejará como mi padre, me dejará como mi amo, estaré solo de nuevo. Sacudo mi cabeza, no, él dijo que volvería, no puede faltar a su palabra, él no es como los demás. Mi corazón me dice que no es como ellos.

Termino de comer y dejo la bandeja a un lado. Me duele un poco el estómago, es la primera vez que como mucho y tan delicioso, me gustaría comer más.

Me acomodo en donde estoy y miro la puerta, esperando que vuelva.

Solo escucho las maquinas que hay a mi alrededor mientras pasa el tiempo, tarda mucho, el vendrá, él vendrá, agarro las sabanas tratando de calmar mi miedo.

Muevo mis orejas cuando escucho pasos cerca, la puerta se abre lentamente y veo unos mechones blancos aparecer por la puerta.

—perdón por tardar—

Y mi pecho se llena de calma al verlo.

—parece que tenías mucha hambre— toma la bandeja y la deja en otro lado, luego toma asiento en el mismo lugar donde estaba antes —se te antoja algo más?— niego —seguro?— asiento en respuesta

Sonríe levemente

—si necesitas algo no dudes en decirme— vuelvo a asentir —pasemos un poco el tiempo, que esto se irá para largo, cuéntame, que te gusta hacer?—

Que me gusta hacer? No tenía permitido hacer mayor cosa, pero había una que podía hacer mientras los clientes descansaban.

—bueno, me gusta ver el cielo—

—el cielo es lindo— mira hacia la ventana

—me gusta cuando está totalmente azul y puedo ver a las aves— porque deseaba tener esa misma libertad, tener alas y simplemente desaparecer entre esas esponjosas nubes blancas.

My Slave App (+18) (Sonadow, Infirokie, Silvephiles, Scourgexfletxmanicxzonic)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora